Martín Coronado/
El Diario
Gran parte de las empresas juarenses enfrentan pérdidas cambiarias, lo que las obliga a contratar deudas en pesos para poder pagar las que tienen en dólares, y así sortear la depreciación que ya supera el 57 por ciento en 33 meses, según informó la Confederación Patronal de la República Mexicana.
Ayer el dólar alcanzó los 19.10 pesos en bancos, mientras que en el mercado de mayoreo Forex subió hasta un nuevo tope de 18.7932 y superó el récord de 18.7884 del 21 de enero pasado. En los centros cambiarios la divisa cerró en 17.70 pesos, 10 centavos más que en el fin de semana.
“Se está dando la negociación de las empresas, muchos que rentamos en dólares nos acercamos con los que nos rentan para fijar un tope en el tipo de cambio porque no va emparejado con la inflación, es un aumento muy grande el del dólar, ha habido mucha turbulencia en ese sentido”, dijo Jesús Andrade Sánchez Mejorada, presidente de la Coparmex en Juárez.
“En ocasiones no se pueden terminar los contratos porque hay penalización, pero en lo general ha habido conciencia por parte de quienes nos rentan los inmuebles”, agregó.
Entre los pasivos en dólares que enfrentan las empresas juarenses están los contratos de renta, proveeduría e incluso deuda contratada en la divisa estadounidense, comentó el líder del sindicato patronal.
El empresario dijo que hace tiempo se trabajaba con mucha estabilidad cambiaria, lo que dio a los empresarios confianza y tomaron compromisos en dólares.
Sin embargo, de un tiempo a la fecha la confianza se ha perdido y los patrones han cambiado sus pasivos a pesos –a pesar de las tasas más altas– sólo para evitar una mayor pérdida si la moneda mexicana sigue cayendo.
Sánchez Mejorada dijo que eso no sucede sólo a nivel empresarial, sino que las personas comunes que tienen compromisos en dólares también sufren el impacto de la depreciación.
Contratos de rentas, de seguros, deudas en El Paso, e incluso mensualidades en escuelas privadas mexicanas tasadas en dólares están afectando a los fronterizos.
Añadió que el sector maquilador se ha visto favorecido lo que facilita las inversiones, y que ello puede ser un estímulo a la economía local.
En la cotización interbancaria del Banco de México la divisa pasó ayer de los 18.4010 pesos por dólar del cierre del viernes a 18.7950 del lunes en la tarde, un aumento de 39 centavos en una jornada.
La reacción del dólar ante el peso de ayer se dio en medio de una jornada en la que los petroprecios internacionales bajaron de los 30 dólares por barril y la mezcla mexicana cotizó en 24.83. Además también se aumentaron los temores por la desaceleración global.
El 9 de mayo de 2013, cuando el presidente Enrique Peña Nieto tenía apenas medio año en el poder, la divisa tocó su punto más bajo a de 11.9599 pesos por dólar, según la cotización interbancaria a 48 horas. Ayer el mismo indicador cerró en 18.7950, lo que implica una depreciación de 57 por ciento en los últimos 33 meses.
Pega a empresas medianas
Las empresas medianas identifican a la fluctuación cambiaria como el principal obstáculo para su crecimiento, de acuerdo con el International Business Report (IBR) de la firma auditora y consultora Grant Thornton.
Durante el cuarto trimestre de 2015, el 48 por ciento de los directivos consultados coincidieron en este resultado, lo cual muestra que cada vez un mayor número de encargados están preocupados.
En el primer trimestre de ese mismo año, la proporción que identificaba al tipo de cambio como el mayor factor de riesgo era de 38 por ciento; para el segundo trimestre, subió a 40; para el tercero, llegó a 48, donde se mantuvo para los últimos tres meses del año.
El segundo y tercer obstáculo para el crecimiento identificados por los líderes empresariales mexicanos fueron la incertidumbre económica y el aumento de los costos de energía, con menciones de 38 por ciento y 34 por ciento, respectivamente.
La tendencia en México es un poco distinta a la que existe a nivel internacional, pues en el obstáculo más mencionado en los otros 35 países donde se llevó a cabo la encuesta fue la incertidumbre económica, con 38 por ciento, seguida de la burocracia, con 32 por ciento.
La fluctuación del tipo de cambio tuvo un promedio global del 25 por ciento. (Martín Coronado/El Diario, con información de Agencia Reforma)
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