Blanca Elizabeth Carmona/
El Diario
El agente adscrito a la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), Eduardo Sotelo Guerra, fue vinculado a proceso penal ayer al considerar un juez de Garantía que aunque el oficial no tenía la intención de asesinar al menor de 17 años de edad sí es responsable porque decidió tomar el riesgo de accionar el arma de fuego contra el civil.
Sotelo Guerra lloró al escuchar el veredicto judicial.
El asesinato de Mario Alejandro Pérez Rivera ocurrió la noche del 30 de septiembre en un lote ubicado en las calles Federico de la Vega de la colonia Parajes de San Isidro, cuando fue perseguido por Sotelo quien presuntamente acción contra él un arma calibre .223.
“Al tomar la determinación de realizar detonaciones con el arma de fuego se colocó en una situación consciente de que con su conducta se preveía la posibilidad de un resultado ilícito. Con lo cual tácitamente acepto la eventualidad de su actuación, de incurrir en un dolo eventual, pues el común de la gente sabe que al realizar disparos con un arma de fuego alguien puede resultar lesionado o que incluso se produzca la muerte, como aconteció”, afirmó el juez Alberto Ocón Campos.
Esa noche, Sotelo patrulla el sector junto con el supervisor Noé Manuel Muñoz Pérez y agente Héctor Daniel Corral de la Torre.
De acuerdo a la versión que ellos proporcionaron una mujer les marcó el alto para reportar que en las calles Federico de la Vega y Mar de Plata se encontraban tres hombres que actuaban de forma sospechosa.
Por lo que acudieron al lugar; al llegar, tres sujetos salieron corriendo y el supervisor intentó entrar al predio con la unidad para darles alcance pero el vehículo se quedó atascado, por lo que Eduardo Sotelo bajó para perseguir a los civiles a pie y al parecer les disparó.
Ayer el juez le otorgó al Ministerio Público un plazo de tres meses para el cierre de la investigación y la posterior solicitud de una sentencia condenatoria.
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