Martín Orquiz/
El Diario
Fronterizos están gastando como mínimo mil 500 pesos para reparar las averías que provocó en sus vehículos la granizada que cayó el martes en la región, pero la inversión puede elevarse hasta los 12 mil pesos cuando los daños abarcan la carrocería y vidrios, dieron a conocer afectados y encargados de negocios del ramo automotriz.
“Andamos muy ocupados, el trabajo se nos multiplicó en un 400 por ciento desde ayer (martes) por la tarde”, mencionó Carlos Alonso Rivas, gerente de Autocristales La Cuesta, quien contestaba el teléfono y le daba información a los interesados en el servicio que no dejaban de llegar a preguntar.
El cúmulo de clientes era tal que muchas de las unidades tuvieron que ser estacionadas en las calles adyacentes al taller, ubicado sobre la avenida Tecnológico, e incluso “trabajarlos” ahí mismo.
Pedro García, uno de los ciudadanos que esperaba su unidad, señaló que pagó mil 600 pesos por el vidrio frontal de una camioneta Ford modelo 1999.
Eduardo González Giner, gerente de Rotocristales, negocio que se ubica sobre la avenida de las Américas, señaló que se les triplicó el trabajo, ya que de 10 personas que acudían cada día a preguntar por algún servicio, la cifra aumentó a 30 el martes. De hecho ya tiene en agenda trabajos que saturaron el taller durante las próximas dos semanas.
Entre las reparaciones más comunes que se realizarán está la reposición de los cristales delantero y trasero de unidades nacionales, que son el mercado que atiende. Los costos de los vidrios comienzan desde los mil 600 pesos, pero pueden alcanzar hasta 6 mil pesos dependiendo de las características del cristal.
Saturan aseguradoras
Decenas de personas abarrotaron ayer las oficinas de la empresa de seguros Quálitas, que están sobre la avenida Tomás Fernández, para verificar si se les iba a cubrir los daños por la granizada, mientras que otros fueron a hacer efectiva la póliza.
Juan Montoya acudió en busca de reparar su vehículo, una Blazer 1998 que resultó dañada del cristal frontal y de la carrocería.
La unidad estaba estacionada en los patios de la empresa maquiladora donde labora, en el parque industrial Intermex que se ubica sobre la calle Santiago Troncoso. “No alcanzamos a salir, sólo escuchamos y vimos cómo estaba cayendo el granizo y golpeando los carros, hasta que se paró salimos a ver los daños”, expuso.
Montoya fue a la compañía de seguros para establecer si contaba con cobertura para ese tipo de averías y cómo podía hacerla efectiva.
Los afectados se estacionaron sobre la avenida sus unidades, donde se contó al menos 60 unidades, pero había más en lugares cercanos. Todos los vehículos lucieron desperfectos, tales como vidrios quebrados y la carrocería dañada por los impactos del granizo.
Un empleado del Gobierno federal, que no quiso proporcionar su identidad, mencionó que su camioneta Trail Blazer modelo 2010 sufrió daños tanto en la carrocería como en los cristales. “En un avalúo que pedí todo me sale como en 12 mil pesos”, comentó mientras señalaba la parte trasera de la unidad cubierta con plástico negro.
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