Blanca Elizabeth Carmona/
El Diario
Rafael Arnulfo de la Rosa Loera, piloto del auto que arrolló y mató a una mujer y causó lesiones a otra en los arrancones del domingo pasado en las Dunas de Samalayuca, fue acusado ayer ante un juez por los delitos de homicidio, lesiones y daños imprudenciales.
El presunto responsable de 51 años, enfrentará su proceso penal en la cárcel al imponérsele la medida cautelar de prisión preventiva por el riesgo que representa el que sea estadounidense y pueda huir a su país.
El juez de Garantía, Félix Aurelio Guerra Salazar, tomó en cuenta que en las horas inmediatas al hecho, cuando había flagrancia por el homicidio imprudencial de Laura Marcela Minjárez Vázquez y las lesiones causadas a Marina Sáenz García, el piloto optó por cruzar la frontera y evitó su inmediata detención.
El juez de Garantía, Félix Aurelio Guerra Salazar, también consideró que el daño a resarcir es superior a los 300 mil pesos.
En la audiencia el piloto se reservó su derecho a declarar y asesorado por su abogada solicitó la duplicidad del término constitucional que es de 144 horas para que le resuelvan si es vinculado o no a proceso penal, por lo que la siguiente diligencia se fijó para el próximo 5 de octubre a las 8 de la mañana.
La medida cautelar impuesta ayer contra el conductor se dio pese a la oposición de la abogada defensora del piloto, Brenda Guadalupe Flores Lara, quien argumentó que su representado regresó a Ciudad Juárez para afrontar las responsabilidades derivadas del accidente y que avisó a la Fiscalía de su estancia en un hospital local.
La audiencia privada en la que le formularon cargos a De la Rosa Loera se llevó a cabo en la habitación 108 de la clínica Nogales, donde el piloto se encuentra internado.
Un agente del Ministerio Público expuso en la diligencia que el accidente sucedió el domingo pasado a las 16:30 horas cuando el piloto maniobraba un vehículo tubular tipo buggy modelo 1997 color café, sin placas de circulación y con número de serie 1CWMW, en una competencia con un diverso automotor, en la zona conocida como Dunas de Samalayuca, en el Ejido Villa Luz.
El fiscal dijo que el conductor iba a exceso de velocidad y perdió el control del volante, por lo que el buggy “se salió de los límites de la pista, arrollando Laura Marcela Minjárez Vázquez, quien se encontraba como espectadora del evento automotor, en el área destinada al público”.
Agregó que Minjárez –quien tenía 46 años– sufrió múltiples lesiones externas e internas y falleció momentos después de ingresar al Hospital 66 del IMSS. La causa de muerte fue choque hipovolémico consecutivo a extirpación de miembro pélvico izquierdo.
El agente relató que Marina Sáenz García, una amiga de la víctima mortal presentó lesiones clasificadas legalmente como aquéllas que no ponen en peligro la vida, tardan más de 15 días en sanar y menos de 60 días y sí dejan consecuencias médico-legales.
El vehículo de Rafael Arnulfo se impactó con un automotor tipo wrangler de color negro, modelo 2004, al parecer propiedad de un familiar de la víctima que perdió la vida, preciso el fiscal durante la diligencia que se realizó de forma privada.
De acuerdo con la declaración de Manuel Troitiño López, esposo de Laura Marcela, hecha ante el Ministerio Público ese día él, sus hijas, sus hermanos y sus cuñadas llegaron al circuito de carros modificados al mediodía y se apostaron detrás de la barrera que ponen por donde circulan los carros.
“Un vehículo de los que participaban en la carrera se fue derechito, sin frenar, a donde estaba mi esposa Laura y una amiga de nombre Marina, las cuales se encontraban en el carro modificado de mi hermano Marco Antonio Troitiño López, el carro estaba parado y ellas estaban ahí sentadas viendo la carrera, cuando esta persona las envistió, lesionando de gravedad a mi esposa Laura y a Marina, a la cual le alcanzó a golpear en un brazo y destrozó el carro de mi hermano”, se documenta en la declaración de la cual El Diario tiene una copia.
Elizabeth Troitiño López, cuñada de la víctima mortal también declaró. Dijo que vio venir hacía ellos un vehículo buggy, de los que llaman “dragster” modificado, y se tiró a la arena alcanzando a observar que ese automotor se impactó con el Jeep color negro propiedad de su hermano y al levantarse vio al conductor que llevaba un casco en colores rojo y azul.
“Yo me enteré del evento por mi esposo, él fue el que me dijo vamos y en un volante observe que decía arrancones El Cochiloco, las personas del staff traían unas playeras color limón. En el área donde estábamos había más vehículos, todo estaba lleno. Al principio del carril si había persona del staff y como a la mitad; pero al final del carril no había nadie; había una ambulancia pero estaba en la parte de abajo en la parte plana, no hubiera podido llegar arriba donde estábamos estacionados. En la parte plano no había policías, yo los vi hasta que había pasado el accidente”, refirió ante la autoridad Elizabeth.
La muerte de Laura Marcela Minjares fue clasificada por el fiscal como constitutiva del delito de homicidio imprudencial en términos de lo previsto en los artículos 123 y 124 del Código Penal del Estado de Chihuahua en relación con el apartado 73 del mismo cuerpo de leyes y que hace referencia a que se trató de un ilícito imprudencial. Además el representante social acusó al piloto del delito de lesiones y daños. (Blanca Elizabeth Carmona/ El Diario)
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