Martín Orquiz/
El Diario
Una mujer que no alcanzó a llegar al hospital dio a la luz en el auto en el que era trasladada por su suegra, quien ante el inminente parto –porque la fuente se rompió– optó por estacionarse en una gasolinera, donde nació el bebé tras recibir ayuda de paramédicos.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 2 y media de la tarde de ayer. Luego de aparcarse en el cruce del bulevar Bernardo Norzagaray y calle Cobre, la madre política de la parturienta Ana Gabriela Tobanches Esquivel se acercó a los tripulantes de una unidad de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) que estaba en el lugar para pedirles auxilio.
Los agentes solicitaron una ambulancia a través de la frecuencia de radio.
Mientras, Ana Gabriela permaneció en el asiento del copiloto tratando de lidiar con los dolores que le produjeron las contracciones.
Casi 10 minutos después, de acuerdo con testigos, al sitio arribaron los tripulantes de la unidad 164 de Cruz Roja Mexicana, quienes de inmediato se aprestaron a ayudar a la mujer.
En un lapso corto el llanto del niño se pudo escuchar desde dentro de la camioneta, después que su madre tuvo que expulsarlo sentada ya que la premura del alumbramiento no permitió siquiera acostarla.
El momento fue captado en video por un fotoperiodista de El Diario.
Los paramédicos auxiliaron a la paciente hasta que el niño salió del vientre y cuando verificaron que estaba bien de salud, al igual que Ana Gabriela, procedieron a realizar los preparativos para trasladarlos.
El bebé fue enredado de inmediato en cobijas que traían consigo su madre y su abuela Florencia Rojas. Dentro de la misma cabina de la unidad le fue cortado el cordón umbilical y se le dio la atención inicial.
Luego de dejarla descansar por algunos minutos, tanto Ana Gabriela como el niño fueron subidos a la ambulancia para trasladarlos al Hospital de la Mujer, ubicado sobre Paseo Triunfo de la República, entre Adolfo López Mateos y Fernando Montes de Oca.
Varias personas que se dieron cuenta del trance por el que estaba pasando esa familia se sintieron aliviados cuando observaron que el parto se estaba desarrollado bien hasta ese momento.
Florencia Rojas contó a los policías que procedían de la colonia Lomas de Poleo, en el norponiente de la mancha urbana.
Dio a conocer que minutos antes su nuera había manifestado molestias, por lo que decidió trasladarla a un hospital ya que previeron que el niño que esperaba estaba a punto de nacer.
Sin embargo, durante el trayecto manifestó contracciones más seguidas y dolor con una mayor intensidad, por lo que se vio obligada a detener la marcha del vehículo para buscar ayuda, la que encontró de forma rápida ya que los agentes policiacos procuraron la atención especializada.
Poco después de las 3 de la tarde Ana Gabriela y su hijo fueron ingresados a las instalaciones del Hospital de la Mujer, donde recibieron atención postparto.
Ayer se trató de entablar comunicación con representantes de esa institución para conocer de forma oficial la situación de los protagonistas de esta historia, pero no respondieron a las llamadas que se realizaron. (Martín Orquiz / El Diario)
morquiz@redaccion.diario.com.mx