Alejandro Tellez/
El Diario
Un grupo de personas identificadas como integrantes de la Unión de Tramitadores Independientes de Autos en Juárez interpuso ayer una denuncia formal ante la Profeco en contra de la importadora “La Única”, que aseguran los defraudó con 200 mil dólares.
Los presuntos afectados afirmaron que la empresa no ha realizado 120 trámites de importación solicitados y pagados desde hace seis meses y tampoco les ha devuelto el dinero, afectando a 28 agentes.
El Diario trató de contactar vía telefónica a representantes de la importadora “La Única”, pero no respondieron a las llamadas.
También se acudió a buscar al personal de la compañía en el edificio en el que supuestamente operan ubicado en la calle Río Nilo, del fraccionamiento Córdova-Américas, sin embargo, ayer se encontró cerrado. En el lugar se apreció una cinta amarilla tipo policiaca que impide el paso al estacionamiento, y afuera hay una manta que anuncia la renta del inmueble.
El pasado 8 de julio El Diario buscó a representantes de la importadora para cuestionarles sobre las restricciones que hay en Aduana para la importación de vehículos, pero el personal de esa empresa hacía dos semanas que había abandonado sus oficinas, según dijeron vecinos del sector. Señalaron que varias personas han acudido al lugar, pero se encuentran con que está cerrado.
Ernesto Bonilla, representante del grupo de quejosos indicó ayer que la demanda se presentó debido al tiempo que ha transcurrido sin que la agencia a la que recurrieron para realizar los trámites de importación de vehículos les haya resuelto ya sea el papeleo o la devolución de su dinero.
“El problema es que tenemos más de seis meses que no nos resuelven, están incumpliendo un contrato y es por esa razón que ahora decidimos interponer una queja ante Profeco y posteriormente ante la Fiscalía. Nos han dado largas y largas, pero ahora ya nos cansamos”, expresó.
“La Única” quedó casi en el control de las importaciones pues al resto de las agencias les retiraron los permisos, denunciaron los quejosos.
Señalaron que quedaron a merced de esa empresa pues era la que realizaba el procedimiento para el resto de los importadores.
Según los afectados, en la compañía les comentan que los “tienen en auditoría” y hasta que acaben les regresarán parte del dinero, pero ya son muchos meses los que les han dicho lo mismo. No especificaron la vía en que mantienen comunicación con ellos.
Los quejosos dijeron que una buena parte de ese dinero pertenece a autos que ya no podrán ser importados por la serie de trabas que impuso el Gobierno a modelos de ciertos años, pero ellos exigen que su inversión sea devuelta.
En enero pasado, cerca de 10 mil vehículos de juarenses quedaron varados en patios y terrenos de alquiler denominados “yardas” en el lado estadounidense por Jerónimo-Santa Teresa, a la espera de ser importados.
Dichas unidades comenzaron a ser ingresadas a territorio nacional de contrabando ante las restricciones para traerlos legalmente.
“La gente que se dedica a la compraventa de autos se ha quedado sin dinero y necesita la inversión que tiene en esos vehículos”, declaró en aquel entonces el líder de la Federación de Asociaciones de Comerciantes de Autos Fronterizos (FACAF), Daniel Cereceres Rosales. (Alejandro Tellez/El Diario/Con información de Francisco Chávez)
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