Blanca Elizabeth Carmona/
El Diario
Al presentar sus conclusiones en el Juicio Oral instruido contra seis hombres acusados de trata y homicidio de 11 mujeres cuyos restos óseos se localizaron en el Arroyo El Navajo, el Ministerio Público (MP) adscrito a la Fiscalía de género reconoció que no tiene una sola evidencia o testigo directo en contra de los sospechosos en lo que corresponde a los asesinatos.
Ayer tanto el MP como los integrantes de las organizaciones “Justicia para Nuestras Hijas” y la “Red Mesa de Mujeres” así como las defensoras de Manuel Vital Anguiano, Edgar Jesús Regalado Villa, César Félix Romero Esparza, José Gerardo Puentes Alva, Jesús Hernández Martínez y José Antonio Contreras Terrazas iban a presentar los alegatos de clausura del debate de Juicio Oral para dar paso al veredicto del Tribunal de Juicio Oral, pero únicamente se logró avanzar con la ponencia del MP y de uno de los coadyuvantes, debido a lo extenso del material.
Unos minutos antes de las 6 de la tarde, el Tribunal de Juicio Oral decretó un receso para continuar hoy miércoles con la argumentación de “Justicia para Nuestras Hijas” y de la defensa.
“No pasa por alto de que no existe prueba de que los acusados materialmente hayan ultimado a las víctimas, no tenemos prueba de que por ejemplo Manuel Vital Anguiano haya estado allá en el Arroyo el Navajo privando de la vida a alguna persona, eso no fluyó ante este Tribunal.
“Pero ello no es óbice o impedimento para que se les pueda reprochar el delito aunque otro miembro de la banda lo haya hecho o ellos mismos y sin embargo no tenemos una prueba fehaciente de que ahí estuvieron materialmente. Pero cuando los acusados prostituyeron a las mujeres ellos (los acusados) sabían que las víctimas iban a terminar fallecidas y que debido al condominio funcional de la banda delictiva alguien de la organización las iba a asesinar y no obstante decidieron cometer el delito de trata”, afirmó el fiscal Noel Orlando Jiménez Holguín.
Luego el representante social dijo que a pesar de esto a cada uno de los procesados se les reprocha que son coautores del delito de homicidio agravado en perjuicio de María Guadalupe Pérez Montes, Lizbeth Avilés García, Perla Ivonne Aguirre González, Idalí Juache Laguna, Beatriz Alejandra Hernández Trejo, Jesica Leticia Peña García, Deysi Ramírez Muñoz, Andrea Guerrero Venzor, Mónica Liliana Delgado Castillo, Jessica Terrazas Ortega y Jazmín Salazar Ponce porque en su mente se representaron que el fin necesario de las jóvenes sería la muerte para que no los delataran. Lo que jurídicamente encuadró en el dolo eventual.
En su intervención frente al Tribunal, el fiscal también indicó que los sospechosos incurrieron un concurso ideal, es decir, al prostituir a las jóvenes u obligarlas a vender droga, iba implícita la vulneración del derecho a la vida de estas mujeres, siete de las cuales eran menores de edad.
“Durante esas acciones delictivas ellos se representaban en su mente que necesariamente esas víctimas no iban a regresar a sus casas se iban a morir y no obstante a ello fueron indiferentes al resultado, no les importó y entonces por eso la Fiscalía de Delitos contra las Mujeres tiene la teoría que con esa misma conducta se vulneraron dos disposiciones legales: trata y homicidio de mujeres”, refirió Jiménez.
A la par de la falta de pruebas directas, desde la semana pasada el Tribunal de Juicio Oral recibió una recomendación de la ONU y otra de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres dependiente de la Secretaría de Gobernación para que juzguen el asunto con perspectiva de género y privilegiando los derechos humanos.
Las recomendaciones fueron gestionadas por la “Red Mesa de Mujeres”, informó Santiago González Reyes.
Respecto al delito de trata, el MP si cuenta con testigos directos.
A Manuel Vital Anguiano “El Meny”, la testigo de iniciales KDM lo señala como la persona que le ofreció trabajo en un puesto de dulces y amigo de un hombre que la violó. Además refiere que después de esa agresión sexual, ambos la obligaban a prostituirse.
A ese procesado se le relaciona con la desaparición de cinco jóvenes, Brianda Cecilia Martínez Gutiérrez, Olga Carrillo Pérez, Claudia Yareth Macías Galindo, Patricia Jazmín Ibarra Apodaca y Andrea Guerrero Venzor, únicamente esta última aparece como víctima en este Juicio Oral.
Otro testigo también refiere que en el segundo piso de la casa de Vital Anguiano, fue prostituida Beatriz Alejandra Hernández Trejo. Y junto a este hombre también fue visto el otro procesado José Gerardo Puentes Alva en poder de jóvenes que después fueron reportadas como desaparecidas.
A César Félix Romero Esparza “El Félix” un testigo refiere que traía a Mónica Liliana Delgado “trabajando” en la zona Centro de Ciudad Juárez; a Perla Ivonne Aguirre González la traía vendiendo droga y después la entregó a sus cómplices
En tanto que a Edgar Jesús Regalado Villa “El Piwi” o “El Negro” se le acusa de haber tenido a Andrea Guerrero Venzor vendiendo droga y de haberla “levantado” junto con José Antonio Contreras Terrazas “El Koyac” debido a que al hacer esa actividad presuntamente robo dinero.
De acuerdo a los testigos tanto “El Piwi” como “El Koyac” también privaron de la libertad a Lizbeth Áviles García, María Guadalupe Pérez Montes y a Beatriz Alejandra Hernández Trejo.
“El Koyac” también está señalado como responsable de “levantar” a Deysi Ramírez Muñoz y a Jessica Terrazas Ortega.
Jesús Hernández Martínez “El Gordo Maloso” o “Chuy” lo señala la madre de Jesica Leticia Peña García como quien brindaba seguridad afuera del Hotel Verde, lugar donde se supone prostituían a varias mujeres; una pareja sentimental de Adrián Roldán de la Cruz alías “Miguelito” o “Z-Uno” supuesto líder de la organización también refirió al Tribunal que Hernández era la mano derecha de este delincuente; la testigo APTN indicó que Hernández secuestró a su hermana porque ya no quería prestar servicios sexuales; el deponente VCO lo acusa de cobrar cuotas y el JMGM también lo vio con “El Miguelito” afuera de ese hotel.