Reforma
2018-11-03
Ciudad de México— Además de la pobreza y de la falta de oportunidades, muchas niñas y adolescentes centroamericanas huyen de sus países de origen porque son víctimas de violencia de género, aseguró Ana Laura Méndez, consultora del Servicio Jesuita para Migrantes de Costa Rica.
"Las adolescentes y niñas, en Honduras y El Salvador, salen por situaciones de violencia doméstica, sexual y de género, en un contexto familiar y por parte de las pandillas.
"La mujer es utilizada como un arma de guerra, es abusada sexualmente", explicó Méndez quien se ha dedicado a estudiar el fenómeno de los niños del norte de Centroamérica que migran solos.
Explicó que los maras suelen reclutar de manera forzada a las jóvenes para convertirlas en esclavas sexuales y para que cumplan tareas domésticas y de cuidados en beneficio de los pandilleros.
"Si un pandillero quiere a una chica de novia es sí o sí", lamentó.
También, les hacen daño para presionar a algún hombre de su familia para que entre a la pandilla, lo que las vuelve siempre un blanco, añadió.
La académica recordó que El Salvador y Honduras son países con las tasas más altas de feminicidios, violencia sexual, de género y homicidios.
"Estos niños tienen un contexto socioeconómico de pobreza, de desigualdad, desintegración familiar, de falta de oportunidades. En estos países, los jóvenes -básicamente- no tienen un futuro", explicó.
Méndez indicó que por este contexto cada vez más adolescentes centroamericanas migran solas.
Se estima, detalló, que el 70 por ciento de los menores migrantes que viajan solos son hombres adolescentes, de entre 13 y 18 años, y el 30 por ciento restante son mujeres, en promedio, de 16 a 18 años.
"Cuando vienen más chiquititos, son bebés de una adolescente o hermanos menores que se van con sus hermanos mayores", describió.
"Y, cuando salen en familia, la razón porque la que salen -generalmente- está relacionada con alguna situación de violencia hacia los menores".
Méndez indicó que es urgente que Estados Unidos reconozca estas causas de migración.
"Asegurar que sólo es migración por cuestiones económicas desestima que realmente hay un desplazamiento forzado por violencia. Ellos deciden migrar para salvar su vida, para buscar mejores oportunidades", dijo.
Respecto a la caravana migrante que transita por el País, consideró necesario que México le ofrezca refugio y un trato humanitario.
"Es darle oportunidad a las personas de ver si realmente su situación amerita protección internacional, porque la migración seguirá pasando. Es tan crítica la situación de estos países que, así les pongan un muro, se lo van a saltar", sostuvo.