Associated Press
2018-09-12Ciudad del Vaticano.- El papa dijo el miércoles que espera visitar Japón el próximo año.
Durante una reunión con una asociación cultural japonesa, Francisco dijo: "Aprovechando esta visita, quiero anunciar mi esperanza de visitar Japón el próximo año. Esperamos hacerlo".
El papa se declaró admirador de la cultura y la historia niponas hace años. Cuando era joven quiso convertirse en misionero en Japón después de ordenarse sacerdote, pero sus superiores frustraron sus esperanzas por la frágil salud que tenía entonces.
Durante su papado, Francisco repetidamente ha expresado su admiración por la labor misionera que realizó su orden jesuita para llevar el cristianismo a Japón en el siglo XVI, y sobre los mártires que sufrieron la subsiguiente persecución anticristiana.
El viaje seguramente incluirá una visita al Monumento de los 16 Mártires en Nagasaki, donde 26 cristianos fueron ultimados en 1597.
Una visita a Nagasaki también le permitiría al pontífice orar por las víctimas de la bomba atómica. Francisco ha suplicado a favor de un mundo totalmente libre de armas nucleares, y hace poco el Vaticano imprimió miles de tarjetas con la imagen de un niño, sobreviviente de Nagasaki, cargando a su hermano, sobre las palabras: "Las consecuencias de la guerra".
Los alcaldes de Hiroshima y Nagasaki habrían pedido a Francisco que visitase la zona para animar a los sobrevivientes de las bombas atómicas de 1945. Y los obispos de Japón le han pedido al papa que venga a visitarlos, en parte para conmemorar a los llamados "cristianos ocultos" que practicaron la fe a pesar de las persecuciones.
La llegada del cristianismo a Japón fue gracias a misioneros jesuitas en 1549, liderados por San Francisco Javier uno de los fundadores de la orden jesuita a la que pertenece Francisco. Para 1585 había tal presencia católica en Japón que un grupo de católicos japoneses fueron al Vaticano para celebrar la elección del papa Sixto V.
Pero surgió una animosidad hacia los cristianos y estalló una ola represiva. Miles de cristianos fueron asesinados entre ellos los famosos 26 mártires. En 1612, un edicto anticristiano fue promulgado y poco después el cristianismo fue totalmente ilegalizado.
Hoy en día hay una pequeña comunidad católica en Japón. Francisco ha elogiado su perseverancia en el contexto de las décadas pasadas de persecuciones.
Juan Pablo II fue el primer papa en visitar Japón, en 1981.