Associated Press
2018-08-23Canberra.- El primer ministro australiano resistía este jueves las presiones de convocar a una elección interna al tiempo que los adversarios dentro de su partido buscaban demostrar que había perdido el apoyo de su gobierno.
Malcolm Turnbull exigió conocer los nombres de los legisladores del Partido Liberal -de derecha- que querían su renuncia antes de permitir que eligieran un nuevo primer ministro en una reunión en el Parlamento el viernes. Esos nombres serían la prueba de que la mayoría del gobierno se había vuelto en su contra.
Turnbull sería entonces el cuatro primer ministro abandonado por su propio partido antes de cumplir el mandato completo de tres años, en una época de notable inestabilidad política iniciada en 2010. La abrumadora mayoría de los australianos detesta esa tendencia.
El principal rival de Turnbull en el gobierno, Peter Dutton, ha dicho al primer ministro que la mayoría de los parlamentarios liberales -al menos 43- no apoyan su liderato, pero los partidarios de Dutton no pudieron conseguir 43 firmas para un petitorio a favor de llamar a una elección interna.
El hecho de que el movimiento por la destitución de Turnbull haya perdido apoyo puede deberse a su advertencia el jueves de que renunciará antes de pedir una votación interna.
Su renuncia obligaría a convocar a una elección extraordinaria que podría costarle al partido gobernante su mayoría de una banca. Su sucesor también podría convocar a elecciones generales.