Agencias
2018-08-22Jerusalén— Irán advirtió este miércoles que golpearía objetivos de Estados Unidos e Israel en caso de ser atacado por Estados Unidos, luego de que John Bolton, asesor de seguridad del presidente Donald Trump, dijera que Washington ejercería la máxima presión sobre Teherán más allá de las sanciones económicas.
Ahmad Jatami, clérigo iraní considerado cercano al líder supremo, el ayatolá Ali Jamenei, aseguró a los fieles en la oración de la festividad del Eid en Teherán que el precio de la guerra con Irán es muy alto para Estados Unidos.
"Saben que si dañan mínimamente a este país y su estado, Estados Unidos y su principal aliado en la región, el régimen sionista (Israel), serían objetivos", advirtió.
Las tensiones entre ambos países se han elevado desde que el mandatario estadounidense retirara a su país del acuerdo nuclear de Irán en mayo y volviera a imponer sanciones para presionar la economía de Irán y forzarlo a renegociar o cambiar de dirección.
La renuncia a un pacto que había relajado levemente la tensión entre Irán y Estados Unidos tras décadas de hostilidad ha generado recelos desde Teherán pese a un renovado malestar por las privaciones económicas, además de que ha alterado a otras grandes potencias donde las empresas han tenido que debatir si retiran inversiones en Irán.
John Bolton dijo que la reimposición de sanciones a Irán tenía un fuerte efecto en la economía y la opinión pública iraní.
"No debería haber duda de que Estados Unidos quiere resolverlo pacíficamente, pero estamos totalmente preparados para cualquier contingencia que genere Irán", afirmó el asesor de la Casa Blanca durante una visita a Israel, país enemigo de Irán en Medio Oriente.
Las sanciones estadounidenses contra Irán iban dirigidas contra el sector automovilístico de dicho país, el comercio de oro y otros metales preciosos y las compras de dólares, cruciales para la financiación e inversión internacional y las relaciones comerciales.
En noviembre se espera la imposición de más sanciones de mayor alcance sobre el sector bancario de Irán y las exportaciones de petróleo.
Para las potencias europeas ha sido complicado asegurarse de que Irán reciba suficientes beneficios económicos como para persuadirlo de permanecer en el acuerdo.
Lo anterior ha resultado difícil porque muchas empresas europeas quieren evitar las sanciones de la Administración Trump.
"Esperamos que los europeos vean, como ven las empresas de toda Europa, que la elección entre hacer negocios con Irán o con Estados Unidos es muy clara", aseguró Bolton.
"Así que veremos qué pasa en noviembre. Pero (Trump) lo ha dejado muy claro, quiere la máxima presión sobre Irán, la máxima presión, y eso es lo que está sucediendo", añadió.
Cuestionado en conferencia de prensa sobre si Estados Unidos había debatido planes con su aliado Israel sobre cómo capitalizar las protestas por la situación económica en Irán y si suponían una amenaza tangible para el Gobierno de Teherán, Bolton aseguró que se busca un cambio.
"Sólo para dejarlo claro, el cambio de régimen en Irán no es un asunto de Estados Unidos. Lo que queremos es un gran cambio en el comportamiento del régimen (...) Vamos a hacer otras cosas para presionar a Irán, más allá de las sanciones económicas", señaló sin dar más detalles.