Associated Press
2018-04-19
Washington— Una "preponderancia de evidencia" indica que hubo presencia de armas químicas –incluidos "elementos" de gas sarín– en los tres sitios que fueron bombardeados por Estados Unidos y sus aliados la semana pasada, informó ayer el Pentágono.
Una conclusión final probablemente seguirá pendiente.
El teniente general de la Infantería de Marina Kenneth McKenzie dijo en una sesión informativa que Estados Unidos cree que el gobierno de Siria –seis días después de los ataques– todavía puede llevar a cabo "ataques limitados" pero que su capacidad para realizar investigaciones o mejorar sus armas químicas ha sido diezmada.
Señaló que las reservas restantes de armas químicas "probablemente están dispersas por todo el país en varios sitios".
McKenzie dijo que si las fuerzas sirias estaban considerando futuros ataques, "deben mirar sobre su hombro y estar preocupados de que los estamos observando y tenemos la capacidad para atacarlos nuevamente".
La evaluación subraya la dificultad de obtener más evidencias definitivas sobre el presunto uso de armas químicas de Siria y de verificar el éxito de los aliados en cuanto a la destrucción de grandes depósitos de gas cloro o de sarín.