Acepta Trump a Jerusalén como capital de Israel

El Diario de Juárez

En una declaración que, desde que se insinuó, causó preocupación en el mundo entero, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reconoció oficialmente a Jerusalén como la capital de Israel, dando marcha atrás a casi siete decenios de política exterior estadounidense e iniciando la implementación del plan para mudar la Embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a la disputada ciudad.

Según expertos, podría afectar el diálogo de paz en la problemática zona, ya que la ciudad santa es disputada por palestinos e israelíes.

“Es hora de reconocer oficialmente a Jerusalén como capital de Israel”, dijo Trump en la Casa Blanca, señalando que los enfoques anteriores hacia el conflicto, como posponer ese reconocimiento, no ha representado avances en el proceso de paz.

Los comentarios de Trump serán los más cuestionados de su presidencia en el tema de Medio Oriente, donde ha prometido mediar “el convenio máximo” entre israelíes y palestinos pero aún no logra ningún avance notorio para poner fin al conflicto.

Al reconocer el presidente a Jerusalén Estados Unidos queda aislado en uno de los temas diplomáticos más espinosos a nivel mundial. Ya despertó una lluvia de críticas por parte de mandatarios árabes y europeos, intensificados la noche del martes cuando la Casa Blanca confirmó los planes de Trump.

El Papa Francisco y el ministerio chino de asuntos exteriores se sumaron al coro de voces advirtiendo que la medida podría desatar una ola de violencia en la región. Durante junta en Bruselas, aliados europeos hicieron severos reproches al secretario de Estado Rex W. Tillerson.

Apenas horas antes de esperarse que Trump declarara a Jerusalén capital israelí, Tillerson dijo aún ser posible alcanzar la paz en Medio Oriente. 

Por lo menos un exfuncionario del gobierno Obama emitió fuertes críticas. John O. Brennan, el exdirector de la CIA, dijo en comunicado que el acto de Trump era “imprudente” y “dañaría por años los intereses estadounidenses en Medio Oriente y haría más inestable la región”.

Funcionarios gubernamentales señalaron esperar repercusiones negativas por parte de los palestinos, entre otros, pero manifestaron que la medida dará celeridad el proceso de paz.

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