Associated Press
2016-03-23Río de Janeiro— Un magistrado de la Corte Suprema fustigó a un juez de un tribunal inferior que difundió grabaciones telefónicas del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, y lo removió al menos temporalmente de toda investigación sobre Lula.
La decisión del juez Teori Zavascki es una victoria para el exmandatario, aunque no llega a permitirle asumir el cargo de secretario de la presidencia de su sucesora, Dilma Rousseff. Tener ese cargo dificultaría abrirle una investigación a Lula por corrupción.
Zavascki dijo que el juez Sergio Moro, quien supervisa la averiguación sobre presuntos hechos de corrupción en la empresa estatal de petróleo Petrobras, hizo mal al difundir las grabaciones, y coincidió con el argumento del gobierno de que al difundirlas el juez puso en peligro la soberanía nacional. Zavascki ordenó que las grabaciones fueran selladas y que Moro fuera temporalmente removido de la investigación.
Moro aseguró que las conversaciones parecían indicar que influenciaba a funcionarios judiciales a favor de Lula.
El ex presidente que está siendo investigado por lavado de dinero en relación con la conspiración de Petrobras niega haber actuado mal.
Las llamadas telefónicas intervenidas son entre Lula y una serie de importantes figuras públicas, incluida la misma Rousseff.
En su fallo, Zavascki dijo que Lula hablaba con autoridades que tienen derecho a la “jurisdicción privilegiada” de la Corte Suprema.
Bajo la ley brasileña, sólo la Corte Suprema puede autorizar la investigación, encarcelamiento y juicio de miembros del gabinete.