Associated Press
2016-02-13
Washington– Cuba regresó un misil Hellfire estadounidense inerte que fue embarcado por error a la isla desde Europa en 2014, informaron funcionarios cubanos y estadounidenses el sábado.
El Hellfire es un misil aire-tierra guiado por láser que pesa aproximadamente 45 kilogramos (100 libras). Fue fabricado por Lockheed Martin y puede ser lanzado desde un helicóptero de ataque como el Apache o desde una aeronave no tripulada como el Predator.
El arma devuelta por Cuba era un misil inerte de entrenamiento que fue enviado inadvertidamente a la isla desde Europa, donde fue utilizado en un ejercicio de entrenamiento de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
No contenía explosivos, pero el envío desviado del artefacto suscitó preocupaciones de que Cuba pudiera compartir la tecnología con potenciales adversarios de Estados Unidos, como Corea del Norte o Rusia. El misil tenía una sección de guía incompleta, no contaba con el sistema operacional de guía, cabeza explosiva, sistema de fusión ni motor de cohete.
“El misil inerte de entrenamiento fue regresado con la cooperación del gobierno cubano”, dijo Mark Toner, vocero del Departamento de Estado. Toner se negó a proporcionar más detalles, pero atribuyó al restablecimiento de relaciones diplomáticas en julio entre los enemigos de la Guerra Fría el haber permitido que Washington se involucrara con La Habana “en asuntos de interés mutuo”.
Funcionarios estadounidenses habían estado tratando de recuperar el misil durante varios meses. El error de embarque fue atribuido a encargados de transporte de Lockheed, pero Estados Unidos señaló el mes pasado que estaba trabajando con el fabricante de armas para recuperar el misil.
En un comunicado, el gobierno cubano confirmó la devolución del misil y afirmó que los inspectores de aduanas lo habían descubierto cuando realizaban una inspección de rutina a una carga que había llegado en un vuelo de París.
El comunicado señaló que el misil había llegado a Cuba como resultado de una “equivocación o mala manipulación” en su país de origen.
“Para las autoridades cubanas resultó preocupante el arribo al país de un medio militar de fabricación estadounidense, que no había sido declarado como tal en el manifiesto de carga de la aeronave que lo transportó “, señaló el gobierno de Cuba.