Orlando Chávez
El Diario
Chihuahua— El fiscal general del Estado César Peniche expuso de la huelga de hambre anunciada por el exauditor general del Estado, Jesús Esparza, forma parte de una estrategia de la defensa y carece de sustento en sus argumentos.
Esparza expresó que es un perseguido de la administración estatal ya que el delito que se le imputa no amerita la prisión preventiva.
Agregó que las pruebas han sido presentadas ante el juzgado y que el proceso se ha seguido con apego a la legalidad, pero este tipo de posturas solamente son utilizadas como un distractor.
“Lo que puede señalar en torno a esto es que nosotros estamos trabajando conforme a derecho, todas las acciones que se han realizado en los temas de justicia para Chihuahua están dentro del marco legal, todas nuestras actuaciones han sido constantemente revisadas por jueces locales, por magistrados locales y por autoridades de amparo así que no hay ninguna irregularidad”, explicó el fiscal.
Indicó que las acusaciones en contra de Esparza están relacionadas con actos de corrupción, pero el exfuncionario utiliza esta estrategia para defenderse.
Esparza informó que iniciará una huelga de hambre ya que lo han mantenido detenido de manera arbitraria durante 18 meses, pues los delitos de los que se le acusa no ameritan prisión preventiva.
Por su parte el secretario general de Gobierno, César Jáuregui, comentó que el implicado tiene el derecho de hacer las observaciones o acciones que considere mejor, pero enfatizó que este tema se resuelve ante las instancias correspondiente.