De la Redacción/
El Diario
Noriel P.G., alias “El Chueco”, líder de un grupo delictivo que controla la región de Urique, es uno de los objetivos principales del gobierno estatal, informó el fiscal César Augusto Peniche Espejel y aseguró que pronto estará ante la justicia respondiendo por las actividades ilícitas que realiza.
Desde hace varios meses, la FGE sigue el rastro de esta persona y se tiene constancia de las actividades ilícitas que realiza, Peniche Espejel afirmó que se trabaja cuidadosamente para poder aprehenderlo.
La población de Mesa de Arturo es una de las áreas controladas por el líder criminal Noel. P. G. alias “El Chueco”, y fue incluida en la búsqueda de Braxton-Andrews, se localiza a 10 kilómetros de la cabecera municipal de Urique, y desde hace varios años ha sido escenario de situaciones violentas.
El titular de la FGE expresó que no se puede descartar una coaptación o influencia del grupo criminal que opera en aquella región sobre las policías municipales de la zona, pues manifestó que existe una debilidad en las corporaciones policiacas que ya se ha expuesto en varias ocasiones y por eso es que se realizan investigaciones en ese sentido.
El municipio de Urique, donde desapareció el pasado 28 de octubre Patrick Baxton-Andrews, originario de Estados Unidos, está controlado por un grupo del crimen organizado que encabeza Noriel P.G., apodado “El Chueco”, según información publicada en medios locales y nacionales.
El grupo de “ El Chueco” atacó el año pasado la comandancia de la policía estatal que dejó como saldo dos agentes lesionados.
Las autoridades saben que Noriel P., es un joven de no más de 30 años que tiene bajo su mando a decenas de personas que suelen vigilar la región de Urique, pero principalmente las comunidades de Ciénega de Trejo, Mesa de Arturo, Bahuichivo, Cerocahui y San Rafael, entre otras.
“El Chueco” tiene relación con otros líderes de grupos que tienen el control de los municipios cercanos, como Guazapares y Chínipas.
El mes de abril del año pasado, trascendió que Noriel P., había caído muerto en una balacera, pero posteriormente lo vieron en un festejo en una ranchería del municipio de Urique.