Luz del Carmen Sosa/
El Diario
Praxedis G. Guerrero, Chih— El hallazgo de seis cadáveres, dos en El Porvenir y cuatro más en Colonia Esperanza mantiene en alerta a los residentes del Valle que denunciaron el mayor panteón clandestino que existe a lo largo de la frontera con Estados Unidos, “pero la Fiscalía se niega a escarbar para no encontrar más cadáveres”.
Las disputas entre los cárteles de Sinaloa y el de Juárez han dejado una estela de muerte en la zona, pues a decir del propio fiscal Jorge González Nicolás, los municipios de Guadalupe y Praxedis G. Guerrero son el paraíso para ambos grupos.
Sin embargo, los vecinos demandan la búsqueda de personas desaparecidas.
“Por qué no rastrean bien, hay muchos ranchos que han sido abandonados y todo mundo sabe que eran casas de seguridad, lo que pasa es que no le quieren entrar a fondo”, dijo un residente del ejido Doctor Porfirio Parra.
El entrevistado conocía al menos a una de las seis personas privadas de su libertad el pasado mes de enero y no descarta que sean las mismas localizadas el pasado lunes y martes en dos puntos diferentes.
Hasta el cierre de esta edición los cadáveres exhumados en fosas clandestinas, entre ellas una mujer, continuaban en calidad de desconocidas, informó Arturo Sandoval Figón, vocero de esta Fiscalía General del Estado (FGE).
El funcionario agregó que la representación social carece de un reporte por ausencia en el caso de Luis Armando Veloz Herrera, de 26 años; Erick Omar Herrera Escajeda, de 32; Ernesto Sánchez Contreras, de 51y Odalia Altamirano Gallegos, de 22 años, además de dos hombres más, ya que la familia declinó comparecer ante el Ministerio Público.
El portavoz refirió que en el caso de los cuatro cuerpos desenterrado en Colonia Esperanza este martes, “se tuvo conocimiento de que en un predio ubicado en el cruce de las calles Fernando Montes de Oca y Vicente Suárez de Colonia Esperanza, municipio de Praxedis G. Guerrero, había cadáveres sepultados de manera clandestina.
“Por lo anterior, el personal del Servicio Médico Forense, entre ellos antropólogos, criminólogos y peritos de campo, así como policías de investigación y agentes caninos expertos en la detección de restos humanos, se trasladaron al lugar antes mencionado”, informó el vocero.
Fue después de realizar varios rastreos en un radio de dos hectáreas, que los elementos del grupo K-9 señalaron un punto donde se efectuaron excavaciones y encontraron los cuatro cuerpos sin vida, tres de sexo masculino y una femenina. Dicha fosa contaba con dos metros de longitud por uno y medio de profundidad, agregó.
La Fiscalía confirmó que los hechos violentos son perpetrados por células del cártel de Sinaloa e informó de la consignación de César Contreras Orozco, un supuesto integrante de esta asociación delictiva, como posible autor de dos homicidios cometidos en El Porvenir.
El detenido confesó ante los investigadores que pertenecía al cártel de Sinaloa y que su función en la organización criminal es asesinar por encargo de sus superiores.
“Por este trabajo recibía un pago quincenal de 5 mil pesos”, según el vocero.
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