De la Redacción/
El Diario
Chihuahua— El juez especializado en Justicia para Adolescentes Infractores, Luis Francisco de León Merino, declaró inimputable y ordenó la libertad de uno de los cinco menores involucrados en el homicidio del niño Christopher Raymundo Márquez Mora, de seis años, cuyo crimen conmocionó a la sociedad chihuahuense y del país por el alto grado de violencia que impusieron amiguitos y primos del pequeño, en hechos ocurridos el mes de mayo pasado en la colonia Laderas de San Guillermo II Etapa.
La audiencia dentro de la causa penal 95/2015 comenzó ayer a las 09:00 horas, en la sala número 19 de Juicios Orales, localizadas en el Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1 en Aquiles Serdán, y se extendió hasta las tres de la tarde.
El juez Merino decretó en su resolución que debido al resultado de los estudios practicados por especialistas en sicología, neurología y paidosiquiatría, al menor de 15 años, identificado con el nombre de “Eduardo”, presenta en su diagnóstico un retraso mental moderado que requiere atención o tratamiento subsecuente.
De la misma forma el menor expresa un lenguaje de un niño de cinco años, así como razonamiento en frases de un niño de 8 años, según uno de los estudios que fue leído en la audiencia, misma que se desarrolló a puerta cerrada.
Es ansioso, obedece a órdenes simples, no sabe los colores, presenta un juicio alterado por probable discapacidad intelectual, se expuso como resultado de los estudios que practicaron diversos especialistas del Hospital Infantil de Especialidades, dependientes del Ichisal. Funcionarios del Centro Especializado de Reinserción Social para Adolescentes Infractores (Cersai) número 1, en donde se encontraba recluido “Eduardo” junto con otro menor de 15 años implicado en el crimen, rindieron también un informe al juez Luis Francisco de León Merino.
En el documento exhibido se detalló que el menor (hoy inimputable), tenía escaso nivel de comprensión y discernimiento, evidenciando dificultades para procesar la información que recibe y consecuentemente para responder, haciéndolo en forma incongruente o bajo la emisión de respuestas monosilábicas de “sí y no”.
Proviene de un núcleo familiar integrado por ambos padres y tres hermanos más, uno de los cuales presenta retraso mental. Los hijos pasan la mayor parte del tiempo en la calle, se leyó en la audiencia, a la que asistieron los padres del niño procesado, personal de sicología del Tribunal Superior de Justicia, los defensores públicos, médicos del DIF, entre otros.
Cabe mencionar que permanecen bajo la tutela del DIF Estatal un varón de 12 años, así como dos mujeres de 13 y 12 años, respectivamente, quienes junto con el otro adolescente de 15 años, que permanece en el Cersai, están a la espera de que inicie próximamente el juicio oral correspondiente.
En la audiencia el juez Especializado para Menores decretó inimputable a “Eduardo” y ordenó su libertad, por lo que hasta antes del cierre de esta edición se estaba a la espera de que se cumpliera y abandonara las instalaciones del Cersai número 1.