Manuel Quezada Barrón/
El Diario
Chihuahua— En el marco del Día Internacional de la Persona Desaparecida-Detenida, el Centro de Derechos Humanos de las Mujeres, hizo un llamado enérgico a las autoridades municipales, estatales y federales, para que se promulgue una la Ley General para Erradicar y Prevenir la Desaparición de Personas, pero que su base fundamental contenga la palabra de las familias víctimas de la desaparición.
Dejaron claro que las personas desaparecidas y sus familiares son sujetos de derecho, no de caridad, ni de asistencia pública; una Legislación que no respete este derecho será una ley ilegítima que sólo perpetuará la impunidad y la violencia.
El CDHM planteó que un día internacional de la persona desaparecida no debería existir, ya que esa tragedia no la debería vivir ninguna familia. “Sin embargo –argumentaron– existen, y tanto familias como pueblos no vamos a permitir que esta trágica práctica sistemática de desaparecer a sus seres queridos se mantenga”.
Informaron que miles de familiares en diferentes estados de la República y Centroamérica salieron a las calles a exigir a las autoridades que los y las busquen y encuentren.
Señaló que esta tragedia humanitaria que se vive en México, derivada de la guerra contra la delincuencia organizada y de políticas erróneas de los gobiernos de la región, han posibilitado la más grave crisis de seguridad y de derechos en la que la sociedad civil es la principal afectada.
Las desapariciones generalizadas en el país están destrozando a los pueblos; a éstas se suma el alarmante aumento de feminicidios, ejecuciones extrajudiciales, la trata de personas, secuestro, desplazamiento forzado a causa de la violencia, entre otras graves violaciones a los derechos humanos.
Como nunca en la historia reciente, se había vivido esta atroz agresión a la población que reside en México o que va de paso por el país.
Sin embargo, denunciaron que a las autoridades no les importa saber si no están, ni siquiera saben cuántos desaparecidos y desaparecidas hay en el país.
En fechas recientes reconoció oficialmente más 26 mil personas “no localizadas”.
Señaló que un gobierno que no protege los derechos de los ciudadanos y niega tragedias sociales y humanas como la desaparición, no es digno de nuestros pueblos, y peor aún, es responsable por estas graves violaciones a los derechos humanos.
Recalcaron que las mujeres sí saben que no están, saben sus nombres uno a uno, son hijos e hijas quienes faltan; no se fueron por gusto o hartazgo, los arrebataron, los y las desaparecieron.
Miles de familias han caminado por años en la búsqueda de sus seres queridos han aprendido a investigar, a buscar, a interactuar con autoridades de todos los niveles, el Ejército o la Marina.
También han aprendidos a redactar leyes y proponer políticas públicas, pero sobre todo han aprehendido a recuperar y defender su dignidad y la de sus seres queridos desaparecidos.