Mario Abner Colina
Agencia Reforma
Los Angeles– 'Star Wars: El Despertar de la Fuerza' es para muchos la película más esperada del año y analistas auguran que romperá récords de taquilla en su estreno.
Pero para Adam Driver, el villano del Episodio VII de la saga galáctica, las semanas previas al estreno del filme se sienten como un trabajo más.
"Claro que siento presión, pero no más porque se trate de esto (Star Wars). Sé que todo mundo quiere verla pero esto, la presión, es la misma hagas lo que hagas. Al menos para mí. Me presiono igual con cada trabajo", dijo Driver en entrevista.
En la película dirigida por J.J. Abrams, que llegará a México el 17 de diciembre, Driver, californiano de 32 años y 1.90 metros de estatura, interpretará a Kylo Ren, un personaje enmascarado, con sensibilidad al lado oscuro de la fuerza, obsesionado con Darth Vader.
El proyecto es el primer blockbuster para el histrión, ganador de la Copa Volpi en el Festival de Venecia, cuya filmografía había navegado entre películas independientes y de autor.
El próximo año saldrá a la luz la película ‘Silence’, que protagonizó junto con Liam Neeson para Martin Scorsese.
Amable, esbozó una sonrisa nerviosa cuando se le preguntó qué pueden esperar los fans del nuevo capítulo de 'Star Wars'.
"No tengo permitido decir mucho, ¿sabes? Es que esto es muy grande. Pero puedo prometer que va a ser buena, muy buena, y que va a sorprender a muchos".
Driver, quien se dio a conocer por la serie de HBO, ‘Girls’, fue un marine estadounidense que pretendía ir a la Guerra de Irak hasta que tuvo una dura lesión practicando ciclismo de montaña.
Hoy en día, a pesar de que es 100 por ciento actor, continúa con la disciplina militar y cada mañana acude al gimnasio para mantenerse en forma solo, sin ningún entrenador.
"Me encanta hacer ejercicio", dijo.