Reforma
2018-09-02Roma- Un amague de parada en pits en la vuelta 21 por parte de Mercedes, precipitó a Ferrari a llamar a Kimi Raikkonen cuando era líder en Monza y ese anzuelo fue suficiente para que Lewis Hamilton, quien se detuvo 8 vueltas más tarde, se quedara con el Gran Premio de Italia y arruinara así el sueño italiano en casa.
Los errores de estrategia de su equipo condenaron al finlandés a la segunda posición al quedarse sin llantas en las últimas vueltas de la carrera sobre el circuito de Monza.
Kimi soportó la presión del Mercedes con las llantas traseras ampolladas, hasta que no pudo más y a ocho giros del final debió ceder al rebase.
Por si eso no bastara para Ferrari, desde la arrancada Sebastián Vettel quedó fuera de la batalla en los primeros lugares, al tocarse con Hamilton en una curva y el alemán quedar con el coche en sentido inverso de la pista, lo que le hizo perder posiciones y remontar hasta terminar en cuarto lugar.
Max Verstappen tuvo otra carrera agresiva en el manejo y terminó tercero, pero al tocar a Valteri Bottas y sacarlo de pista, fue sancionado con cinco segundos y perdió el podio.
Bottas subió para el 1 y 3 con la escudería alemana.
El mexicano Sergio Pérez terminó en octavo lugar y redujo los efectos de un mal sábado, al fallar en la calificación.
Checo tuvo un manejo agresivo también y desde la arrancada fue ganando lugares, incluso con un toque desde la primera vuelta con el Haas de Kevin Magnussen, quien le cerró el espacio en una recta.
Así el tapatío quedó apenas detrás de Esteban Ocon, a menos de un segundo y por estrategia del equipo para mantener el séptimo lugar en el que partió el francés.
Con la victoria de este domingo en la casa de Ferrari, Hamilton aumentó la ventaja a 30 puntos sobre Vettel en la lucha por el título mundial de pilotos. El británico llegó a 256 puntos.