Associated Press
2018-07-26
Nueva York— Este jueves, el astro de las artes marciales Conor McGregor se declaró culpable de alterar el orden público a cambio de ser sentenciado a prestar servicio comunitario para resolver los cargos fincados a raíz de una trifulca que tuvo lugar tras bambalinas en un recinto deportivo de la ciudad de Nueva York.
También se evaluará a McGregor para que participe en un programa de manejo de la ira además de realizar cinco días de servicio social.
Junto al peleador irlandés de 30 años, en el juzgado compareció su amigo Cian Cowley, de 25 años, a quien se sentenció a prestar tres días de servicio comunitario y asistir a un programa sobre el manejo de la ira.
En un video tomado en abril se aprecia a alguien que parece ser McGregor arrojando un diablito a un autobús lleno de peleadores poco después de una rueda de prensa para promover el evento UFC 233 celebrado en el Barclays Center de Brooklyn.
El vidrio quebrado lesionó a dos de los peleadores, quienes no pudieron competir.
McGregor pagó la reparación del autobús.