Jesús Rodríguez
2016-04-25
Luego de 15 años, Chihuahua no tendrá representación en la disciplina de clavados en la próxima edición de la Olimpiada Nacional.
Tras la salida de los entrenadores rusos, Anatoli Kalashnikov y Liudmila Kalashnikova, los clavadistas poco a poco se marcharon.
Actualmente la fosa de clavados del Centro Acuático Universitario de la UACJ ya no tiene la práctica de este deporte. Si bien es cierto el espacio de la alberca es utilizado por los equipos de polo acuático, la fosa ya no opera.
“La universidad vive del recurso público y nos revisan con lupa, en ese sentido, cuando había fosa de clavados, ya hacia el final, eran seis u ocho alumnos los que la utilizaban, y el cuestionamiento era que se gastaba mucho dinero para la utilidad que se tenía con tan pocos alumnos y ninguno era de la universidad”, comentó la maestra Rosana Ramírez Martínez, directora general de Extensión y Servicios Estudiantiles de la UACJ.
El último competidor fue el juarense Eduardo Castro Silva, quien se despidió en 2015 de la Olimpiada Nacional que se realizó en Nuevo León, después de once años de defender la camiseta del estado de Chihuahua.
Dos años antes, debido a la falta de entrenador en esta ciudad, Eduardo y su hermano Mauro cambiaron de residencia y se fueron a León, Guanajuato, donde trabajaron bajo la supervisión de Francisco Rueda.
Los entrenadores rusos, que llegaron a la UACJ en 2000, bajo la administración del rector Rubén Lau Rojo, se retiraron a su lugar de origen por cuestiones personales.
“En su momento los directores del Instituto Chihuahuense como Luis Alfonso Rivera y Miguel Ángel Rodríguez nos apoyaron, luego con la salida del entrenador ruso en diciembre de 2012, Luis Alfonso solicitó a la Conade el apoyo para que se nos otorgara un entrenador, pero no se nos brindó”, aseguró Blanca Silva, presidenta de la Liga Municipal.
A finales del año pasado, cuando el ICHD, que encabezaba Raúl Saucedo Gaytán, dio a conocer que Chihuahua sería sede de la Olimpiada Nacional y que Ciudad Juárez tendría el desarrollo de algunos deportes, la disciplina de clavados estaba contemplada para esta frontera desde su fase estatal.
Al ser cuestionado sobre qué clavadistas del estado estarían en competencia, el dirigente sólo se limitó a decir “pronto los conocerán”.
El desenlace fue fatal para Chihuahua, no sólo en la disciplina de clavados, sino en todo el proceso de cara a la Olimpiada Nacional, ya que finalmente se quitó al estado como sede, a Ciudad Juárez como subsede y el directivo dejó su cargo.
“Nos debemos a los universitarios, vemos con buenos ojos a los externos, pero ahorita hay una utilidad mucho más alta con el polo acuático”, dijo la maestra.
“Nosotros hacemos primero una encuesta, un estudio, observamos cuáles son las actividades deportivas que quieren los universitarios y sobre eso trabajamos. No podemos invertir una cantidad ‘x’ en actividades en las que no se involucren los estudiantes”, añadió.
La señora Silva aseveró que se está trabajando en una nueva solicitud para que al estado de Chihuahua la Conade le otorgue un entrenador de los que tiene y paga.
“A pesar que la UACJ no tiene a los clavados como una disciplina de competencia siempre nos ha brindado su apoyo, espero que más adelante no sea la excepción, ya que estamos por comenzar a platicar con los institutos del deporte en Juárez y Chihuahua, para que ellos a su vez sean el lazo con Conade; la Federación Mexicana también podría interceder”, declaró la presidente de la liga.
En la actualidad en el estado de Chihuahua no existe otro inmueble que pueda cobijar los deseos de deportistas que buscan que el mayor grado de dificultad por enfrentar se encuentre en la plataforma o en el trampolín y no en una hoja de papel sobre un escritorio.