Associated Press
2016-02-06
San José, California— Peyton Manning quiso poner una cosa muy en claro cuando arribó a la ciudad de San Francisco para la celebración del aniversario de oro del Super Bowl: “Nuestra defensa es la que nos trajo hasta aquí”.
Von Miller, Chris Harris Jr. Dereck Wolfe, todos siendo sólo espectadores desde la lateral la vez pasada, ahora estarán al frente del equipo.
Su jefe, John Elway, dijo algo muy similar hace 17 años, antes de retirarse con un segundo anillo del Super Bowl. Manning puede hacer lo mismo el domingo si logra dar entrega de otra mágica actuación a sus 39 años, manteniendo una condición física formidable y una ágil mentalidad.
Hace dos años, Manning llegó al Super Bowl con la mejor ofensiva de la liga —de hecho, siendo el equipo con el mayor puntaje en la historia de la NFL— y las cosas no resultaron como se esperaba. Esta vez, trae consigo a la mejor defensa de la liga.
Los Broncos terminaron en primer lugar de la NFL en derribos, yardas por jugada, defensa al mariscal y defensa total. Pero para llegar a ocupar un lugar en la cima, al lado de los Osos de 1985, o los Ravens del año 2000, La poderosa línea frontal de Denver y su secundaria plagada de jugadores estelares tendrán que acorralar a Cam Newton y vencer a las Panteras.
“Tenemos unas pizarras en nuestros vestidores en las que llevamos el registro de todo lo que hemos logrado este año”, dijo el esquinero Aqib Talib. “Pero todo eso quedará en el olvido para la próxima temporada si no regresamos a casa con un trofeo. Es por eso que la estadística más importante es ganar este partido.”
Y son muy capaces de lograr justamente eso.
Esta es una defensa que hiso añicos a Aaron Rodgers, limitándolo a sólo 77 yardas en el peor partido de su carrera, envió a Andrew Luck al hospital y eliminó a Tom Brady en la postemporada llegándolo a golpear hasta en 23 ocasiones. Los jugadores dicen que es muy difícil para ellos estudiar el video de cómo otras defensas jugaron contra las Panteras.
“Nadie está jugando en verdad de la manera como nosotros jugamos y eso hace que sea muy difícil ver los videos porque ves a otros equipos que no son tan buenos. No logran estar al mismo nivel”, dijo Harris. “Ellos tienen una muy buena ofensiva, por lo que será una difícil batalla. Pero creo que nunca se han enfrentado a alguien que tenga la velocidad que nosotros tenemos”.
Lo que los Broncos (14-4) necesitan hacer es mantener las cosas en orden y no dejar que las Panteras (17-1) tengan un poderoso arranque al comienzo del partido —superaron a sus oponentes 55 a7 en las primeras mitades de los partidos de los playoffs.
Denver sabe que un buen golpe al esófago puede arruinar grandes planes de juego.
Los Broncos no estaban muy bien preparados para el ruido y los nervios hace dos años, cuando el primer saque puso a un corredor en camino a la zona de anotación en los primeros 12 segundos del Super Bowl. Denver nunca se recuperó de un déficit de 35 puntos propiciado por los Halcones Marinos, lo cual instó a Elway a desembolsar 100 millones de dólares para contratar a DeMarcus Ware, T.J. Ward y Talib, luego seleccionar al esquinero Bradley Roby y al apoyador Shane Ray.