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Conmociones no alarman a jugadores de la NFL: estudio

Associated Press

2016-02-01

Nueva York─ Durante sus 15 años estrellándose contra otros mastodontes y recibiendo todo tipo de golpes, el exreceptor de los Broncos Brandon Stokley sufrió lesiones desde los pies hasta la cabeza, incluidas al menos una docena de conmociones cerebrales.

Pero la única vez que pensó seriamente dejar de jugar fue en su cuarta temporada, cuando tuvo un problema con un huesito del pie derecho.

"Le dije a mi esposa, `hasta aquí llegué. No soporto este dolor todos los días''', comentó Stokley en una entrevista con The Associated Press.

Sin embargo, siguió jugando y el dolor fue desapareciendo. ¿Las conmociones? Esas siguieron acumulándose, pero Stokley les restó importancia a pesar de lo mucho que se hablaba de los peligros de esos golpes. En sus días de jugador, se preocupaba más por los problemas inmediatos que por aquellos a largo plazo.

"Con las conmociones, generalmente uno se ausenta una o dos semanas y después está bien'', dijo Stokley, quien tiene 39 años. "Pero te arruinas la rodilla y está afuera un año. El hombro, un año''.

Un estudio de la AP reveló que la mayoría de los jugadores de la NFL tienen actitudes similares respecto a las conmociones. Menos de la mitad de los 100 jugadores consultados, 39, dijeron preocuparse más por los efectos de las conmociones a largo plazo que por otras lesiones.

De los otros 61 jugadores, 20 dijeron que las conmociones no les preocupaban en lo más mínimo y 41 que les inquietan lo mismo que las demás lesiones.

"Personalmente, no pienso en las lesiones en la cabeza. No me afectan'', sostuvo Nikita Whitlock, de los Gigantes de Nueva York. "Me pregunto, ¿cómo estarán mis articulaciones en 20 años? ¿Aguantarán mis rodillas en 20 años? ¿Y mis hombros y muñecas? Esos son los puntos realmente débiles de tu cuerpo''.

Esas fueron las respuestas prevalecientes a las preguntas de los periodistas de la AP, como si los jugadores ignorasen todo lo relacionado con los traumas en la cabeza.

La semana pasada se reveló que Tyler Sash, quien ganó el Super Bowl del 2012 con los Gigantes y falleció a los 27 años, sufría de una encefalopatía traumática crónica, o ETC. El mal está asociado con los golpes repetidos a la cabeza y sus síntomas incluyen pérdida de memoria, depresión y demencia progresiva.

También padecían ECT Junior Seau, miembro del Salón de la Fama que se suicidó, y Chris Borland, apoyador de los 49ers que se retiró repentinamente.

Exjugadores radicaron demandas relacionadas con las conmociones y la NFL tomó varias medidas para tratar de combatirlas.

Durante los partidos de la temporada regular se informó de 182 conmociones, lo que representa un aumento del 58% respecto al año previo, según la NFL.

Y sin embargo...

"No me preocupa'', dijo el corredor de Oakland Jamize Olawale. "Creo que se exageran las cosas''.

"Uno puede lastimarse la cabeza de muchas maneras'', expresó el línea defensivo de Houston Charles James.

Hay jugadores que sí se toman en serio las lesiones cerebrales y dicen que uno puede curar rodillas y caderas, pero no puede reemplazar un cerebro.

"No quiero perder la memoria. Quiero saber lo que pasa con mi vida'', declaró el  jugador de Detroit Darious Slay. "Si te golpean en la cabeza y sufres una conmoción, puede que no te acuerdes quién es tu hijo, quién es tu madre. Yo no quiero eso. Llévate mis piernas''.

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