Associated Press
2015-07-29
Oxnard, California— Jerry Jones, quien hace apenas una semana le reemplazaron la cadera con una cirugía, se sentó en una silla para estar presente en el evento tradicional del campamento de entrenamiento que no quería perderse: la supervisión anual de los Vaqueros por el propietario de Dallas.
Justo minutos después durante la víspera de la primera práctica del campamento, Jones estuvo interesado en verificar de qué manera los campeones defensores del Este de la Conferencia Nacional parecen haber recuperado un poco su paso.
¿Coincidencia? Tal vez no, considerando lo ansioso que estaba Jones para mostrarles a los reporteros qué tan cerca está de poder caminar sin renguear, ocho días después del procedimiento al que se sometió para reparar la parte izquierda de la cadera.
“Veo más frescura, más ojos brillantes y actitud de novatos en este equipo, por cualquiera que haya sido la razón, comparado con hace cinco años”, dijo Jones ayer, refiriéndose a la vez anterior en la que Dallas ingresó al campamento viniendo de una victoria en playoffs.
“Parece que tienen una actitud de “Déjeme jugar, entrenador. Voy a estar allí de una manera o de otra. Sólo dígame cómo hacerlo”. No voy a llamarle ingenuidad. Es sólo una actitud de “vamos a ponernos a trabajar porque nos pueden pasar buenas cosas”.
El mes que transcurrió entre el término de las prácticas de la temporada baja y reportarse a California, los Vaqueros perdieron al apoyador Rolando McClain debido a una suspensión de cuatro partidos, debido a una violación a la política de abuso de sustancias de la NFL.
También se enteraron que la suspensión del ala defensivo Greg Hardy debido a un caso de violencia doméstica fue reducida de 10 a 4 partidos.
Sin embargo, el problema potencial más grande que había en el campamento fue solucionado justo horas antes cuando el receptor All-Pro Dez Bryant firmó un contrato por 70 millones de dólares por cinco años después de advertir que podría ausentarse de California y hasta podría faltar a unos partidos si tenía que jugar con un contrato por un año como jugador franquicia.
“Yo creo que fue un buen acuerdo”, comentó el vicepresidente ejecutivo Stephen Jones, quien tomó un vuelo a Nueva York en compañía de su papá y manejador general un día antes de la fecha límite del 15 de julio para concretar el trato con los representantes de Bryant.
Dallas ahora tendrá que encontrar la manera de reemplazar a DeMarco Murray, campeón de acarreos de la NFL quien firmó con Filadelfia, su rival de la División.
Es probable que Joseph Randle, el relevo de Murray durante dos temporadas, inicie el campamento con el primer equipo. Sin embargo, Darren McFadden, quien tuvo siete temporadas decepcionantes en Oakland tendrá la oportunidad de mostrar qué puede hacer en una de las mejores líneas ofensivas de la NFL.