LA COLUMNA
de El Diario
• Juárez es Morena, pero con voto diferenciado
• Comen en Juárez rectores de la UACH y UACJ
• Grave exposición de datos personales en SAT juarense
• Socio de Palacio en PRI estatal despide a empleados
El fenómeno Morena-AMLO en Chihuahua alcanzó para muy buen remojón a los candidatos a senadores, refrescante chapuzón también a los postulados a diputados federales y locales, pero hasta ahí. No alcanzó para los abanderados a las alcaldías. Se quedaron sólo cinco de las 67 presidencias municipales para Morena.
Lo anterior significa que podemos dejar en relativo el fenómeno electoral extraordinario que golpeó lapidariamente al PRI, al PAN y PRD prácticamente en todo el país.
A nivel estatal López Obrador obtuvo aproximadamente 450 mil votos; los senadores de Morena, Bertha Caraveo y Cruz Pérez Cuéllar alcanzaron ligeramente arriba de los 400 mil sufragios; de las 22 diputaciones locales, Morena lleva 10 contra 11 del PAN y sólo una del PRI. Morena ganó cinco diputaciones federales y sólo 14 de las 67 sindicaturas. Muy repartido.
Ciudad Juárez podemos decir que concedió a Morena el fenómeno de la elección vertical pero sospechosamente raro. Muy cerca del 50 por ciento de los votos obtenidos en el estado por López corresponden a esta frontera; nueve de los 10 distritos locales también son de Juárez y cuatro de las cinco diputaciones federales fueron logrados acá.
La alcaldía juarense está colocada al lado de Morena con una diferencia de apenas seis mil votos entre su candidato, Javier González Mocken, y el independiente Armando Cabada.
Hasta el domingo que entreguen las correspondientes constancias de mayoría los órganos electorales obtendremos las cantidades exactas de votos pero de entrada sabemos que González Mocken obtuvo así como 135 mil sufragios, casi 90 mil unidades menos que López Obrador.
Ciudad Juárez fue prácticamente todo para el tabasqueño y su partido Morena salvo esos “detalles”. Ahí están los números. En la ciudad de Chihuahua los panistas opositores a Corral no dejaron sufragios ni para el voto cruzado. Se llevaron todo.
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Ayer se dieron el tiempo de la comida para conversar al menos un par de horas los rectores de la Autónoma de Chihuahua, Luis Alberto Fierro, y el jefe de la Autónoma de Ciudad Juárez, Ricardo Duarte.
No creemos que el tema para encontrarse en un lugar tan concurrido como Los Arcos haya sido la sucesión en la máxima casa de estudios juarense; brincos diera Fierro por que tomaran su punto de vista al respecto, más bien debió ser el enorme retraso que trae el rector de la UACH en la departamentalización que le debe al patrón gobernador del estado.
Llegaron las elecciones, hay nueva bancada en el Congreso del Estado que tomará protesta en octubre y es hora que no es concretada la nueva ley orgánica de la UACH, cuyo objetivo esencial es convertirla en modelo UACJ para ahorrar en gasto corriente, uno de los muchos compromisos incumplidos de Corral.
El retraso de Fierro huele a sabotaje. A estas alturas del partido sabe que el patrón ha dejado de mandar en el Congreso aunque los nuevos diputados tomen protesta hasta dentro de tres meses.
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La base de datos de cualquier administración del SAT es, por sí misma, todo un tesoro de información valiosa. Contiene datos tan certeros como nombre, dirección, actividad, declaraciones, ingresos y otros igual de vitales, de todos los contribuyentes que declaran al SAT.
¿Se imagina lo que se puede hacer con esa información, estimado lector? Afortunadamente es información vital protegida en las leyes mexicanas por el secreto fiscal. Lo malo es cuando ocurre, como está pasando en Juárez, que dicha información se empieza a filtrar a discreción bajo cuerda.
Resulta que diversos empresarios, comerciantes y contribuyentes en general, han visto su información confidencial del SAT en diversos procesos y trámites de toda índole, desde créditos y apoyos financieros, hasta juicios mercantiles o administrativos ¿Cómo es que llegó ahí esa información que debería ser absolutamente confidencial?
Todas las investigaciones realizadas por cuenta y riesgo de los afectados para saber cómo y quién filtró ilegalmente sus datos, llevan a una colaboradora del SAT en Juárez.
Se trata de Martha Gabriela Gutiérrez Alarcón, quien se desempeña con el cargo de administrativo tributario, en la Administración de Servicios al Contribuyente de esta frontera, quien estaría detrás de todo este tráfico de datos e información secreta de los causantes juarenses.
¿Sabrá de todo esto el administrador general del SAT? ¿A quién más se le vende este tipo de información que podría ser por demás valiosa, y poner en riesgo incluso la integridad de los contribuyentes? Veremos pues hasta dónde llega el hilo conductor de esta trama telenovelesca de tantísimo peligro para miles de contribunetes.
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El nombre de Ricardo Rodríguez Lugo es familiar porque ha sido mantenido como secretario de finanzas del PRI en el estado no obstante su relación estrecha y hasta de negocios con Palacio de Gobierno a través de su socio en la Secretaría de Innovación y Desarrollo Económico, Alfredo de la Torre Hernández.
Ese hecho comprobado documentalmente puso de pelos al grueso del priismo cuando fue descubierto, pero de forma inexplicable ha sido sostenido en su cargo ese funcionario.
Rodríguez Lugo ha tenido el carácter de odioso por ese motivo y porque trata con la punta del pie al personal que labora en la sede del Revolucionario Institucional. Déspota, corriente, autoritario, cerca de lo inhumano, le han dicho en su cara.
Para derramar la gota que faltaba al vaso, el miércoles empezó Rodríguez citando al personal a su oficina, de uno por uno, para anunciarles que serán despedidos. Algunos tienen mínimo seis meses laborando, otros superan los 24 años, casi al punto de la jubilación.
Les notificó el jefe de finanzas que a partir de la próxima quincena no habrá más sueldo pero quienes quieran seguir asistiendo a sus labores lo pueden seguir haciendo por generosidad hacia “el partido que les ha dado tanto”.
Con sobrada calidad moral, los empleados acusan a su secretario de finanzas de haber cometido irregularidades con los dineros del partido porque llegaron muchos millones de prerrogativas por parte de los órganos electorales y no todo fue gastado. También hubo dinero de “cuotas” cobradas a todos los candidatos a todos los cargos de elección “para costear los sueldos del partido”. Todo desapareció y no únicamente en las campañas.
Lo más extraño de todo es que Rodríguez sea tolerado por el presidente del comité estatal, Omar Bazán. De plano no es de su equipo... ¿entonces?
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Todavía les alcanzó el presupuesto a algunos independientes para darse un lujito ayer en La Borrega. Desayunaron y platicaron durante buen rato los regidores y los candidatos a los distintos cargos de elección.
Fueron encabezados todos por José “Pepe” Ávila Cuc y Margarita Peña, dos piezas importantes del alcalde Armando Cabada tanto en el interior del Cabildo como en la reciente operación electoral.
Reflexiones, análisis y datos, muchos datos, sobre las causas de la derrota, encaminadas ellas a la intensa guerra del gobernador Corral contra el Municipio, pero más todavía a las evidentes traiciones manejadas algunas desde los centros comunitarios.