Opinion

El tsunami pejista en Chihuahua

Luis Javier Valero Flores
Analista

2018-06-20

Si el acto inicial de la campaña de Andrés Manuel López Obrador, en el antiguo Paso del Norte, había impactado al país entero, por el número de asistentes y  por lo inesperado de la cifra tan alta para una plaza extremadamente difícil para las izquierdas de todos los tiempos, el cierre de campaña en la capital chihuahuense, el lunes anterior, ha dejado pasmada a una buena parte de la clase política local y dejado una grata impresión en no pocos chihuahuenses, de todas las latitudes.
En el medio periodístico, en los corrillos políticos y entre los analistas, en los días previos, se esperaba, hasta con morbo político, la realización de los dos eventos principales de los dos más importantes candidatos presidenciales: Ricardo Anaya, del PAN, y López Obrador, de Morena.
Anaya realizó un mitin en el gimnasio Manuel Bernardo Aguirre con un lleno completo, en el que, quizá, participarían alrededor de 8 mil personas, cifra muy cercana a la realidad, pues se supo que habían dejado en cada uno de los 7 mil 300 asientos del gimnasio una camiseta de la campaña para que así cada asistente la portara.
Como es costumbre, desde hace ya varios años, de todos los partidos políticos, la concurrencia se integró, también, con asistentes de otras partes del estado, no obstante los elevados costos para hacerlo.
Cuenta, además, en el caso de la alianza Por México al Frente (PAN-PRD y MC) que contaron con la fortaleza, de todo tipo, que les da ser el partido en el Gobierno del Estado y de varios de los municipios más habitados de la entidad.
Pero dos días más tarde, con dos horas de retraso, el mitin del tabasqueño iniciaba a plaza llena, la del Ángel, en el centro de la capital del estado grande.
Más aun, AMLO terminó su discurso pocos momentos antes de las 10 de la noche.
¿Cuántos asistentes eran? Si nos apuran podemos concluir que alrededor de 10 mil, en el mejor de los momentos. Lo que sorprendió, además de la cantidad, fue la perseverancia de la multitud y su composición: hay malas noticias para los adversarios del tabasqueño en Chihua-hua, pues a mayoría absoluta de quienes fueron a disfrutar el discurso de “El Peje” eran de capas medias, medias bajas y de bajos recursos económicos.
Y esa es la mala noticia: ¡son muchos los ciudadanos que pertenecen a esos estratos sociales!
Como en Delicias y Cuauhtémoc, la recepción al candidato rayó en la idolatría de muchos de sus seguidores, amén de la forma en que la mayoría sigue su discurso, que alcanza sus mejores momentos cuando repite alguno de los anuncios más exitosos, como el de que, “si soy populista, me anoten en la lista”.
Pero el hecho histórico queda ahí. El pasado lunes se realizó el mitin de las izquierdas más grande de la historia en Chihuahua, con carácter electoral, pues probablemente las movilizaciones de la vieja organización agrarista, la UGOCM, pudieron ser mayores, pero tenían un claro sentido social, gremial, y se inscribían en el marco de la lucha por la tierra y en contra de los cacicazgos existentes hasta mediados de la década de los sesentas del siglo pasado.
El próximo domingo haremos las reflexiones generales sobre la campaña electoral y las previsiones que nos permitan hacer los datos a la mano, pero es indudable que los candidatos de la alianza Juntos Haremos Historia (Morena-PT y PES) recibirán muchos votos más que los recibidos por López Obrador en 2012 en nuestro territorio: 305 mil.
No hay punto de comparación entre el apoyo que recibió hace seis años y lo que ahora muestra la gente, casi de cualquier círculo social; con la presencia de un fenómeno: el de que a mayores ingresos económicos más se acentúa la preferencia por los otros dos candidatos, en especial por el del PAN.
Lo hemos escrito antes, pero no sobra. A esos más de 300 mil votos deberán sumarse los 50 mil del PES y los 60 mil de los electores de izquierda que sufragaron en 2016 por Javier Corral. Hoy no lo harán y entonces AMLO superará, con toda facilidad, los 400 mil votos, muy cerca de los hipotéticos 440 mil alcanzados por Corral en aquel año.
Pero lo seguro es que por su cuenta, el tabasqueño pueda captar otros 100 mil votos con lo que superará, incluso, los 500 mil del actual gobernador, de ahí el pronóstico, empatándolo con el mitin en la Plaza del Ángel, de que López Obrador también ganará, en Chihuahua, la elección presidencial y que sumará, en un vuelco impresionante, al norte “rejego”, a la fila de las entidades que optarán por la izquierda en esta elección.

X