LA COLUMNA
de El Diario
• Obligan en Bachilleres a curso electoral
• Mocken y “Teto” en sus cumpleaños
Es toda una simulación la vida política del gobernador, Javier Corral. Incontables son los análisis sobre lo apartados que están sus discursos de sus hechos. Son dos cosas por completo distintas. Agua y aceite, caminos paralelos que jamás se cruzan, cielo e infierno...
Corral es un santo en el verbo, una estafa en la sustancia. Provocarán estas definiciones ira entre sus seguidores, muy respetables algunos, los genuinos idealistas, pero ni siquiera ellos tendrán elementos para rebatir que el uso de la flotilla aérea de Gobierno del Estado por parte de su jefe político ha resultado en un desastre político y administrativo.
Respira el gobernador los mismos aires que dejó en las mismas aeronaves su abominado antecesor, César Duarte. Bebe en los mismos vasos. Come en los mismos platos. Usa los mismos asientos, los mismos respaldos de aviones y helicópteros rechazados con todo su corazón durante la campaña electoral porque se trataba de excesos, de “super lujos”, que la “opción preferencial por los pobres” pondría a subasta apenas tomara el control del Poder Ejecutivo.
Toda una mentira que le ha salido más cara aún a los chihuahuenses, de acuerdo al trabajo periodístico presentado ayer por El Diario. Más de 30 millones de pesos del presupuesto estatal han sido destinados exclusivamente al mantenimiento de aviones y helicópteros que ahora usa el gobernador hasta para ir al baño (lleva más de 100 viajes registrados, uno de ellos para solo 60 kilómetros de viaje). Ni altura requirió entre el origen y el destino del vuelo.
Muy pronto se acomodó Corral Jurado a la vida sibarita que señaló con irritación pero en la que ahora está mejor que acoplado.
Ayer envió a El Diario una “nota aclaratoria” sobre el tema la coordinación de Comunicación Social del Gobierno estatal. Comedida, por cierto, pero que refrenda el ángulo mostrado en el trabajo periodístico: incumplimiento en la venta prometida, los 100 millones de gasto en mantenimiento de la flotilla y el centenar de viajes realizados exclusivamente por el gobernador; muchos más por sus colaboradores.
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Ya sabemos que los buenos modos no son ingrediente en la receta de Teresa Ortuño Gurza como directora general del Colegio de Bachilleres en el estado. Acaba de enviar un oficio nada comedido a los titulares de área, coordinadores de zona, directores de plantel “y a todo el personal” del Colegio obligándolos a tomar un curso llamado “blindaje electoral”.
“En atención al próximo proceso electoral 2018 y a las instrucciones giradas por la Secretaría de la Función Pública, a través de la Secretaría de Educación y Deporte, les informo DE LA MANERA MAS ATENTA (¡!) que todos estamos obligados a tomar el curso en línea denominado blindaje electoral”.
La fecha máxima para entregar la constancia de haber “cumplido con esta capacitación” es el 22 de marzo; es decir, pasado mañana.
Eso “de la manera más atenta” contrasta con la advertencia de que el curso debe ser llevado por todo el personal de Bachilleres, “sin excepción alguna”.
Eso no había ocurrido nunca en el Colegio de Bachilleres puesto que se da por hecho que sus aproximadamente dos mil empleados, entre administrativos y académicos, conocen los alcances de su participación electoral como integrantes de distintas fuerzas políticas.
El curso no es otra cosa que un acto intimidatorio más de Ortuño hacia el personal a su mando. Sigue intentando deshacerse de trabajadores que vienen de otras administraciones y de los directores que lograron sus cargos a través de exámenes en el Sistema del Servicio Profesional Docente.
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El secretario de Seguridad Pública Municipal, Ricardo Realivázquez, no estuvo en el funeral de los integrantes de la Fiscalía zona norte, Arturo Ledezma y Saúl Flores. Pero tampoco estuvo el gobernador, Javier Corral, que en pocos casos ha brindado su solidaridad a elementos de la Fiscalía asesinados.
Por razones más que lógicas tampoco se hizo presente el amigo, jefe de Ledezma y titular de los agentes del Ministerio Público en esta frontera, Ulises Pacheco. Él era el objetivo de los sicarios. Ahora está resguardado en las oficinas centrales de la Fiscalía General del Estado.
Llama la atención la ausencia de Realivázquez en el acto, todavía guarda enojo por la consignación de los elementos preventivos acusados por la Fiscalía de privación ilegal de la libertad. Ya fueron absueltos pero ni disculpas hubo del titular de la institución estatal aquí, Jorge Nava.
Había buena comunicación; hoy es fría, la elemental y punto.
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El sábado cumplió años el virtual candidato de Morena a la Presidencia Municipal, Javier González Mocken. Desde luego no importan las décadas que lleva el abogado en este mundo, importa saber que fue un festejo muy distinto el que tuvo esta vez incluidos los cumpleaños transcurridos como catedrático de la Autónoma de Ciudad Juárez.
Los asistentes a la pachanga en el centro recreativo Las Fuentes llevaban más intenciones electorales que protocolos festivos. Se concentraron en medir asistencia y ser vistos muy cerca de quien andará muy solicitado al menos de aquí al primer domingo de julio próximo... y en una nada, más allá.
Maurilio Fuentes no se despegó del candidato ni para apagar la velita del pastel. El hombre fuerte de “Teto” Murguía fue visto como inminente coordinador de la campaña morenista.
Alrededor de ellos estuvieron el patricista, Mauricio Martínez, “El Piri” Holguín, el otro destacado tetista, Nayo del Villar, Lalo Mariscal, directivos de las barras y colegios de abogados, donde Mocken tiene gran cantidad de fans, varios regidores, José Luis Morales, exdirector de Desarrollo Urbano con Enrique Serrano, varios líderes de colonias antes identificados con el PRI; el catedrático de la Autónoma de Chihuahua, Luis Herrera, y al menos otras 90 gentes más.
Queda claro que Mocken ya desarrolla todas sus actividades como candidato a la Alcaldía por Morena. Su formalización como tal para este fin de semana por Yeidckol Polevnsky, pinta para mero trámite.
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Hasta foto tuvo una partecita del equipo de “Teto” Murguía el valor de enviar a varios medios informativos por una comida que sostuvieron ayer en Los Arcos. Unos aseguraron que fue para “celebrar” el lugar 15 que le aventaron al exalcalde del PRI nacional en la lista de candidatos pluris, pero el propio Murguía afirmó que fue por su cumpleaños seis cinco, seis décadas y media.
Mientras ellos departían alegremente entre lonjas de pescado, tequila y algo de cerveza, en alguna otra parte de la ciudad continuó su trabajo electoral el principal equipo operador de “Teto”: liderado por Maurilio Fuentes. No con el PRI sino con Morena, como es público ya.