Elvira Maycotte/
Académica
Seguramente, entre las causas que han originado los problemas que enfrentan día tras día los moradores del fraccionamiento Riberas del Bravo es haberla concebido, precisamente, como “fraccionamiento”, y estas son las razones. En nuestro país, todo asentamiento que rebasa los 15,000 habitantes deja de considerarse rural para tomar la categoría de urbano. En estos términos, en el Estado de Chihuahua sólo 24 de sus 67 municipios pueden considerarse como urbanos y de éstos sólo 10 tienen más de 45,000 habitantes. Esto es muy importante porque las ciudades destinan el suelo para diferentes usos, como el industrial, servicios, espacios abiertos, vialidad, baldíos y habitacional.
Y aquí radica el principal problema: entre el año 2002 y 2004 en las nueve etapas de Riberas del Bravo se edificaron 12,062 viviendas, en las cuales, de manera conservadora, es decir, considerando que en cada vivienda podrían vivir cuatro personas, tendríamos que de entrada este “fraccionamiento” se “pensó” para unas 48,000 personas, es decir, una población similar a Camargo, que de acuerdo a los datos que nos proporciona INEGI para el año 2015 tiene 51,572 habitantes, a la de Jiménez con 42,860, Meoqui con 44,752 y casi igual a la de Nuevo Casas Grandes, que cuenta con una población de 63,412 habitantes. ¡Riberas, por sí misma, pudiera considerarse entre los 10 municipios más poblados del estado de Chihuahua!
Y esta es la historia: como fraccionamiento y por ser de tipo social, con sólo destinar el 14% del área a urbanizar para equipamiento al momento de diseñar el proyecto era suficiente para cumplir con la normatividad aplicable y obtener la autorización correspondiente; de hecho, si consultamos el plan maestro elaborado exprofeso para Riberas, encontraremos que para este efecto se consigna un porcentaje aún mayor, por lo que ni siquiera podemos decir que la causa de sus problemas se deba a que incumplieron los reglamentos.
¿Qué pasa, entonces? El tema aquí es que, además de que en el área de donación tenemos algunos “detalles”, entre ellos que buena parte del área destinada a área abierta o recreativa en realidad es un gran parque lineal que al centro lleva un canal de aguas negras abierto; que en otras partes destinadas a equipamiento para desarrollo social y salud, hoy vemos “tiendas de conveniencia”; que aún permanece baldío el predio donde debiera estar una casa de la cultura y, lo que debiera ser un corredor ecológico, hoy es una terminal de camiones urbanos. Nos quedan debiendo también guarderías y más jardines de niños y escuelas primarias, pues aún lucen desiertos los predios que los deberían alojar. La biblioteca a la que alguna vez se le dio el estatus de municipal no es más que un par de viviendas abandonadas y mal ubicadas que fueron pobremente adaptadas para cubrir fines políticos.
Ya de entrada tenemos frente a nosotros un motivo estructural del por qué los residentes de Riberas del Bravo enfrentan día tras día condiciones adversas. Es difícil pensar que aun cuando existen escuelas primarias de doble turno éstas no son suficientes: hoy por hoy nos encontramos niños que por su edad debieran estar en cuarto año de primaria y sus padres todavía no han podido obtener un lugar para inscribirlos en el primer año por no tener un hermano mayor que estudie ya en el plantel. En las escuelas secundarias el tema no es mucho mejor y, en preparatoria la situación es crítica, como lo es casi en toda la ciudad, pues pareciera que al dotar de equipamiento educativo solo se piensa en jardines de niños y escuelas primarias, como si los entonces niños nunca fueran a crecer y a requerir avanzar en su nivel educativo.
Riberas del Bravo NO es un fraccionamiento, ES UNA CIUDAD, pero a su vez está tan lejos de serlo… no se lo hemos permitido; es una ciudad con muchas carencias de fondo, estructurales, que se han intentado resolver con soluciones parciales, a manera de una pintura de cal que solo blanquea por un rato para al poco tiempo desaparecer y dejar todo igual. Y pensar que Riberas del Bravo no es la única ciudad disfrazada de fraccionamiento en nuestra ciudad: ahí tenemos otros “fraccionamientos” como Roma, Las Haciendas, Parajes del Sur, Parajes de Oriente y Praderas del Sol, entre otras, con sus más de cuatro mil viviendas, ¿le suena que pudieran tener, o tienen ya, los mismos problemas?
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