LA COLUMNA
de El Diario
• Primer encierro de UD y comisión electoral
• Cabada en aquel paquete chilango-tapatío
• Discusión en chat por ingresar a Palacio
En Guanajuato Margarita Zavala se reunió con simpatizantes y recordó el 78 aniversario de la fundación de su partido, Acción Nacional. Ricardo Anaya hizo lo propio a través de redes sociales y en la sede del PAN. El poblano Rafael Moreno Valle anduvo con la mexicanada por Los Ángeles; desde allá también recordó el nacimiento del blanquiazul fundado por Gómez Morín.
En Chihuahua pasó por alto esa celebración. En Juárez peor aún. El dirigente estatal panista, Fernando Álvarez; y el presidente del comité municipal en esta frontera, Jorge Espinoza Cortez, olvidaron o no quisieron recordar aquellos eventos con discursos indigestantes que caracterizaban a los 14 de septiembre. No antes, no después.
De Espinoza se entiende, nunca ha querido el cargo, menos ahora que ganó la gubernatura su partido y no ha recibido del pastel ni betún duro; nada. El gobernador Corral no lo pela; la vicegobernadora Lety, que manda en Juárez, tampoco, pero Fernando pertenece al equipo más estrecho del mandatario estatal. De él no se explica la omisión.
Los líderes del blanquiazul al menos llevaban en otros tiempos alguna ofrenda floral o se apersonaban cantando himnos y declamando discursos de Gómez Morín y otros fundadores. Hoy nomás las palomas y los chanates se acuerdan de ellos; por necesidad de inodoro, igual que lo hacen con todos los próceres de hierro, bronce, cantera... No discriminan ni lo hacen por ofender.
Supimos que Fernando preparaba algo “muy íntimo” para celebrar ayer pero ni eso. Quizá hoy la caiga el veinte y haga algo. Un cumpleaños con mariachi, Mañanitas y flores a posteriori.
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Los universitarios recibieron con agrado especialmente uno de los seis puntos del “pliego petitorio” lanzado por Universidad Democrática (UD) al interior y también al exterior de la Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ). Noviembre es de elección de su Consejo Universitario, los miembros de este órgano elegirán en agosto del año entrante al nuevo rector.
El punto al que nos referimos es el del voto secreto; en los otros cinco exigen convocatoria 2017-2018 consensuada con la comunidad universitaria, respeto a la legislación interna y al reglamento de elecciones; junto con el voto secreto, transparencia y escrutinio abierto en el lugar del sufragio; no intervención de la burocracia universitaria a favor o en contra de algún candidato, erradicar la discriminación de las candidaturas y reglas claras en la resolución de las inconformidades.
Universidad Democrática arrancó su campaña denominada “Juego Limpio” en momentos que los distintos grupos internos han saltado a la arena de la disputa por Rectoría. La propia UD tiene su corazoncito puesto en el mayor cargo de responsabilidad en la UACJ.
Ayer mismo tuvieron los de UD su primera “audiencia” con los integrantes de la comisión electoral. Desayunaron en el Café Único, Norberto Acosta, Rafael Torres y Edgar Martínez, de la UD; el presidente de la comisión, Francisco Bribiescas; y un representante del Consejo Universitario, Raúl Ponce.
Eso es empezar con el pie derecho el proceso electoral, dijeron. Desde Palacio observan de cerca el desarrollo de los acontecimientos. Mencionamos el jueves la reunión entre el secretario general de Gobierno y el rector, Ricardo Duarte.
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Vamos en esta columna a la par de los acontecimientos que vive la UACJ en la renovación de su consejo y de Rectoría. Hay un solo gran elector de rector. Es sabido: el gobernador del estado, pero su decisión va en la medida del entorno, circunstancias y coyunturas. No están las condiciones para una imposición a la malagueña; de ahí la campaña de UD y de la fila de candidatos a Rectoría que se ha formado.
La UD tiene filiación izquierdista. Algunos de sus miembros van de la mano con los objetivos del tabasqueño Andrés Manuel López Obrador (AMLO), otros con una izquierda de menor perfil, entre perredismo y el grupo que pronto deberá definir si continúa con Morena o sigue los planes del gobernador, Javier Corral: son los rojiazules encabezados por el secretario de Desarrollo Social del Gobierno estatal, Víctor Quintana Silveyra, por décadas también en la nómina de la UACJ.
El gobernador es ampliamente conocido en el campus. Estuvo ahí casi todo el tiempo de su carrera en derecho, sólo le faltó la titulación. Fue cabeza de playa junto con su compadre Cruz Pérez Cuéllar para permear de panismo a la universidad a través de Jus Pax. Esa influencia se mantiene.
Para el gobernador, entonces, son más que familiares todos los nombres de quienes aspiran a la Rectoría. Conserva amistad cercana con varios de ellos. Si este factor fuera el predominante en la sucesión podríamos hablar de fulano o zutano –ya lo hemos hecho- pero el activismo de los distintos grupos de poder no necesariamente afines al nuevo amanecer pueden ser también determinantes.
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Vaya escándalo que se armó ayer en el chat whatsapero de Comunicación Social del Gobierno estatal. Muchos colegas se lamentaron de no ser incluidos entre los invitados a beber algún caballito de tequila y comer pedacitos de sandwich en el interior de Palacio de Gobierno, a donde sí estuvo convocada la élite del nuevo amanecer, sobre todo la élite de la “preferencia por los pobres”.
Decimos que con justa razón porque si bien algunos colegas buscan sólo codearse con los grandes de la grilla y saborear también las tapas de jamón, aceituna y queso atravesados con picadientes, la mayoría van en busca de la noticia. Palacio de Gobierno no es la Torre Trump, o el rascacielos Sears, o el centro histórico de Slim... es un edificio público.
Siempre ha sido así. Innecesariamente hay desgarramiento de venas en los chats, sólo que ahora no solamente los colegas sino la población en general han considerado que ayer tarde-noche pintaba la celebración de independencia en Palacio como la más elitista de su historia, ni con Pancho Barrio y todo su terracismo habría ocurrido eso.
Ahora entendemos el celo del jefe de escoltas, Juan Manuel Escamilla, por revisar hasta los cubreasientos de las sillas.
A ver cómo amanecen hoy todos para el desfile popular respectivo. Inicia a las diez de la mañana. Tendrá su templete principal en la Plaza Mayor, a un costado de Palacio de Gobierno. Bronceada gratis para todos.
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También en el sector oficialista municipal juarense ha pegado el escandalito que se trae en la perla de occidente el alcalde, Enrique Alfaro.
El presidente municipal de Guadalajara, postulado por el Movimiento Ciudadano, traía algo más que mejores migas con el jefe de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, a su vez uno de los padrinos del juarense, Armando Cabada Alvídrez.
A principios de febrero estuvieron los tres políticos en la ciudad de los vientos, Chicago, con el alcalde Rahm Emanuel. Los mexicanos prometieron luchar en favor de los dreamers y contra el trumpiano proyecto de construir el muro.
Que sepamos no volvieron a tocar esos temas pero sí mantuvieron comunicación política liderada por el perredista jefe de la Ciudad de México. Venía pintando bien el futuro.
Desde hace algunas semanas Alfaro agarró distancia de Mancera y se acercó de nuevo a su antiguo correligionario partidista, Aristóteles Sandoval. Tricolor gobernador de Jalisco.
Replicamos aquí los hechos ocurridos en el Congreso del Estado de Jalisco. Hubo golpe de estado entre Alfaro y Sandoval para hacerse del control de dicho órgano, lo cual significa que no hay reversa en su alianza. En Chihuahua pega al gobernador, Javier Corral, por el acuerdo que trae el MC; en Juárez significa una pieza menos en la alianza con Mancera.