Carlos Irigoyen/
Analista
¿Independencia? La Real Academia Española dice que es cualidad o condición de independiente, libertad; espacialmente la de un estado que no es tributario independientemente de otro o entereza, firmeza de carácter.
Por asignación somos independientes, pero por convicción nos gustan los lazos rudos, somos un pueblo masoquista; quizá somos más dependientes que la Nueva España en tiempos de la colonización.
No ha cambiado mucho la esclavitud, lo que ha evolucionado son los grilletes.
Por un momento imaginemos al cura Hidalgo, dando su apasionado grito de Dolores, arengando a rebelarse contra el yugo español, a no aceptar más la profunda división social entre esclavos y opresores.
En aquel momento el esclavo que era apenas un humano y a todas luces servil, un ser humano sobajado en sus derechos elementales de libertad, un ser humano que moría de hambre bajo la mesa de los manjares que disfrutaban quienes tenían esclava a nuestra nación. Hoy, la prosa de la historia sigue siendo muy similar; el INEGI afirma que 3 de cada 10 mexicanos tienen 66 centavos de cada peso, el 10 por ciento de los mexicanos tienen solo 9 centavos y el 60 por ciento de la población está arreglándoselas con 25 centavos de ese peleado peso.
Pero en aquel tiempo había un liderazgo que sabía del gran riesgo que tenía al tomar la gesta de la liberación, una acción que pagaría con su propia vida, tanto así que exhibieron su cabeza para servir de escarmiento a los que osaran “ponerse vivos”. Hoy tenemos vacíos de liderazgos, ausencia de autoridad, frases vacías, frases imprudentes, mercadotecnia de vacío; en muchos lados los líderes están enfermos de diarrea verbal y estreñimiento intelectual. Las patadas sobre la mesa son tan evidentes que entre todos se acusan de algo; mesiánicos, corruptos, ilustrados, mojigatos, anticipados, hipócritas; como diría Pompín Iglesias ¡Qué bonita familia!
En el lado empresarial pocos líderes y muy enfocados a hacer chelines o bien a defender las causas que enarbolan, al momento de pedirle su inclusión en la política para manejar los destinos de la nación algo pasa que no se animan. ¿Académicos? Pocos y muy metidos en su ramo de estudio, alejados de los foros de dirección de las voluntades populares. ¿Ciudadanos? Hay un desencanto, la figura del independiente se ve grisácea. Eso a nivel nacional, pero ¿Juárez?
Nuestra ciudad no canta mal las rancheras de cara al año que viene. Es casi un reflejo de esta situación, agravada por intensos problemas de infraestructura, de colaboración entre entes gubernamentales, de atropellamiento de iniciativas entre asociaciones y sí, de ausencia de liderazgos. No se ve por donde, no hay claridad en ese tema; muchos los llamados y pocos serán los escogidos. ¿De verdad seremos independientes cuando la percepción nos marca una notable pugna de intereses entre los que toman decisiones para la ciudad?. ¿Cuando la sociedad desconoce una planeación estratégica que nos invite a sumarnos a un rumbo?. ¿Cuando se sigue pensando en nuestra ciudad como mano de obra con bajo salario?. ¿Cuando la violencia se placea en nuestra plaza de forma inmisericorde?. ¿Cuando como sociedad, no manejamos los niveles elementales de respeto con nuestros semejantes?. ¿Cuando la confianza hacia nuestras Instituciones sigue estando en niveles de verdad sorprendentes por lo bajo?. ¿Cómo podemos aspirar a ser independientes cuando no levantamos la mano ante un cinturón de pobreza tan apabullante?. ¿Cómo querer ser independientes cuando miles de padres se escudan en su necesidad de ser proveedores de una familia para excusarse de mostrar amor a sus hijos y construir junto a ellos el futuro de todos?.
Quizá muchos acudan a festejar a El Punto, una ubicación simbólica y mística utilizada para las fiestas populares, esas que pueden conquistar los corazones de los juarenses y ya entrados en la carrera pues una que otra simpatía muy necesaria para el 2018. Quizá y ya entrados en el ambiente hasta puedan cantar algo de la banda MS: "Háblame De Ti", cuéntame tus penas o si alguna vez alguien te ha lastimado, si tu corazón por el momento es libre o ya está ocupado, porque el mío creo que a partir de hoy alguien me lo ha robado y esa eres tú, háblame de ti, ojalá y me digas que estas disponible solo para mí”.
Lo que no sabemos es si será una canción al amor de pareja o a la intención de voto, para sin duda a ambas les queda el saco. Y así, después de ver tantas y tantas cosas que nos atan a una tremenda desigualdad entre el desarrollo económico y social de nuestra frontera. ¿Será oportuno festejar la independencia?. ¿Por convicción de ser o bajo el deslumbre del oropel de la simulación de ser independientes?.
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