Francisco Ortiz Bello/
Analista
“Chihuahuenses: mientras resolvemos algunos de nuestros más ingentes y urgentes problemas, y mientras llega la ayuda que requerimos, discutamos animada y concienzudamente sobre la inmortalidad del cangrejo, los hoyos negros del universo, y hasta de lo injusto que resulta para Clarita que su malvada abuela la maltrate tan feo”.
Ese es el mensaje que recibimos del gobierno estatal todos los chihuahuenses el pasado viernes.
Un columnista de la capital del estado, se refirió al Encuentro Chihuahua ocurrido en esa ciudad el pasado viernes, como los “diálogos bizantinos por Chihuahua, haciendo hincapié en la necesidad de cambiarle el nombre a la entidad por el de Constantinopla Chihuahua, por supuesto como resultado de esos diálogos “pues el Gobernador del Estado prefiere la entelequia, la borrachera de la grandilocuencia, para sentarse con sus ‘amiguitos’ a filosofar sobre las necesidades de la incipiente democracia a la mexicana y lo que el país requiere rumbo al proceso electoral presidencial del 2018, en lugar de ponerse a gobernar” citó en su columna el periodista César Ibarra.
Explica Ibarra en su texto el origen del término “discusiones bizantinas” que, “cuando los turcos otomanos tomaron a la ciudad de Constantinopla, a la que tenían cercada desde el 7 de abril, poniendo fin con ese acto a la llamada ‘edad media’, fue cuando nació la frase esa de ‘discusiones bizantinas’, pues mientras los turcos que eran comandados por Mehmed atacaban con todo, en la ciudad los gobernantes discutían sobre si los ángeles tenían sexo y ombligo o si solo eran espíritus puros que tomaban la imagen similar a la nuestra solo para identificarse con los seres humanos que fuimos creados a imagen y semejanza de Dios”.
La semana que hoy termina, el gobernador del estado Javier Corral canceló su actividad pública en esta frontera, luego de una prolongada ausencia y de disfrutar su tercer periodo vacacional o de descanso, desde que está al frente del gobierno estatal.
Sin mayores explicaciones, como si los juarenses no importáramos en el contexto de su administración, el área de comunicación social informó que el lunes pasado solo atendería reuniones privadas de trabajo ¿Puede haber espacios “privados” en el ejercicio de un cargo eminentemente público? Ahí queda para la discusión, el debate, la pregunta. Sus fieles seguidores dirán que sí, pero desde luego que existen opiniones mejor calificadas en contra.
El caso es que la razón por la que el gobernador suspendió su agenda de trabajo, previamente planeada para esta frontera, fue porque se concentró de lleno en la organización de un “gran evento” que se realizó el fin de semana en la capital del estado. Hasta eso, siendo el gobernador de Juárez, no ha privilegiado esta frontera para la realización aquí, de eventos relevantes y más aún en el contexto nacional. ¿Por qué no se le ocurrió realizar el “Encuentro Chihuahua” en Ciudad Juárez? ¿Qué no dijo durante su campaña y al rendir protesta del cargo que Juárez sería su prioridad? Hasta hoy no se ha visto.
Durante la semana, nos enteramos por La Columna de El Diario, que lo que tuvo al gobernador completamente ocupado y concentrado, es la organización del “Encuentro Chihuahua: Problemas Contemporáneos de México”, a realizarse en la Casa Chihuahua, con la participación de muy diversos y distinguidos invitados.
Nombres como el de Alejandra Barrales, presidenta nacional del PRD; el exsecretario federal, Fernando Elizondo; Ricardo Anaya, dirigente del PAN en el país; Cuauhtémoc Cárdenas, Martha Tagle, Alfredo Figueroa, Emilio Álvarez Icaza, Clara Jusidman, Jorge Castañeda, Porfirio Muñoz Ledo, Agustín Basave, Guadalupe Acosta Naranjo, Santiago Creel, etcétera, desfilaron por el pódium, el estrado y la tribuna mediática informativa.
Bueno, hasta Gustavo Madero Muñoz apareció entre la lista de invitados distinguidos cuando, siendo él de casa, se supone que se daba por sentada su presencia. O será que como casi ya no lo ve (aquí en Chihuahua) debido a sus múltiples y absorbentes ocupaciones en la capital del país, Corral decidió invitarlo, no fuera a ser que no estuviera presente alegando algún encargo de su otro jefe (Madero tiene dos jefes) Ricardo Anaya.
Por cierto ¿Cómo justificará el gobernador que Madero esté en la nómina estatal y ande trabajando para el partido en la capital del país? ¿Cómo justificará esa fotografía de primera plana en tres diarios capitalinos con Madero, Acosta, Mancera y Beltrones juntos?
En este “mega evento” en la capital del estado, se discutieron grandes temas de la problemática nacional. De acuerdo con el comunicado oficial, se habló sobre “el mercado interno débil, la soberanía nacional mermada, la insultante desigualdad social, la violencia y la inseguridad, el régimen político agotado, la debilidad democrática” y otras minucias de la grilla nacional. Problemas todos, sin duda, de gran envergadura pero que tienen su propia versión y dimensión doméstica en Chihuahua.
Qué bueno. ¡Qué padre!. ¿Y Chihuahua?. ¿Cuándo se discutirán en una mesa similar los grandes temas y pendientes del estado que gobierna el mismo organizador del evento? ¿Cuándo se convocará a todos los actores sociales, a todos sin excepción, para discutir la problemática estatal?. Esa que sí nos pega directo a los chihuahuenses.
Y no es que estemos de amargosos, como seguramente afirmarán los fieles seguidores del gobernador, solo que no alcanzamos a entender cómo es posible que se empeñen y destinen cuantiosos recursos de las finanzas estatales, de todo tipo, para atender una problemática nacional, sin antes hacer exactamente lo mismo con la propia del estado.
En Chihuahua no estamos como para andar organizando “fiestas” ajenas. Hay muchos pendientes que requieren no sólo la atención y buena voluntad del gobernador, sino soluciones efectivas, concretas, tangibles, visibles.
Con el “mega evento” del pasado viernes, el gobernador ignora que existe un grave conflicto en el Colegio de Bachilleres que está a punto de dejar sin clases a poco más 50 mil alumnos en toda la entidad, y quién sabe a cuántos más en todo el país, porque el Sindicato del Cobach ha confirmado que el paro laboral sería a nivel nacional derivado del conflicto en Chihuahua.
No importa el clima de inseguridad y criminal que priva en la sierra y en varios municipios del estado. No importa el drama que viven cientos de familias que lo perdieron todo durante las pasadas lluvias. No importa que Chihuahua siga descendiendo en los índices de inversión privada. No importa que el Sistema Estatal Anticorrupción esté frenado. No importa que no avance la Reforma Electoral del estado. No importa que la obra pública no aparezca por ningún lado. Nada de eso importa. Hay que privilegiar por encima de todos esos temas, y otros más, los grandes problemas del país. Y hay que hacerlo además en un escenario vistoso, lucidor, magno, para que todo mundo se entere que estamos muy preocupados, y ocupados, en resolver la problemática nacional. Aunque se nos esté cayendo la casa encima.
Es como si en un hogar, la madre estuviese mortalmente enferma, y en medio de una lastimosa y costosa agonía, el padre decidiera festejar en casa el cumpleaños de su hermana, que ni siquiera vive con ellos. Exactamente lo mismo. Así de mal nos vemos ante el resto de la comunidad nacional.
Claro que nos da gusto que cualquier chihuahuense destaque en el plano nacional. Que sea protagonista de primer nivel en la política del país. Claro que se reconoce y enorgullece. Siempre y cuando no descuide las tareas propias de su encargo que es gobernar el estado de tiempo completo.
Por lo pronto, la agenda de la semana pasada para Ciudad Juárez se canceló con todo y los grandes pendientes y la enorme lista de personas que buscan una entrevista con el gobernador, desde hace ya bastante tiempo. Esa agenda se ha reprogramado para mañana. Esperemos y no se le ocurra al gobernador alguna otra celebración, reunión o diálogos bizantinos, que cancelen nuevamente esa agenda para mañana.
Bien decía mi abuelita con su profunda ignorancia académica, pero su gran sabiduría de vida: “no seas candil de la calle y oscuridad de tu casa”.
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