LA COLUMNA
De Los Reporteros
• Comandos cibernéticos de @ y Corral
• Que no han pagado por logo multicolor
• Graciela riega su jardín en Juárez
• “Teto” sale a que le pegue el sol
El miércoles estuvo circulando en todo tipo de mensajería virtual un texto-parodia que intentó ridiculizar la reunión que sostuvo en la Ciudad de México, el presidente municipal, Armando Cabada, con funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en nuestro país. ¡Y si lo hubieron visto en ese periplo con políticos de Durango!.
Ese material, memes y otros “productos” circularon a exceso de velocidad por el ciberespacio algunas horas buscando obviamente afectar la imagen del independiente alcalde.
Rascamos algo a los orígenes de ese tipo de “campañitas” y nos encontramos con dos equipos poderosos que se encargan de ensalzar figuras o destrozarlas por todo el mundo del internet. Varios priistas en Juárez que tienen el modo económico operan el suyo; en el Congreso del Estado hay un cuartelito modesto, en la Presidencia Municipal de Chihuahua también tienen uno medianón.
Pero los fuertes, “los titanes de las redes sociales, hackeos, campañas de cualquier tipo”, están ubicados en la independiente Presidencia Municipal de Juárez, con Carlos Olivares al frente; y en el Gobierno estatal, con Eduardo “Lalo” Rojero a la cabeza.
De Olivares ya comentamos que hace sociedad y equipo con su jefe inmediato el director de Informática del Municipio, Miguel Rojas, pero trae cuerda en ese mundo desde que laboró para la exprocuradora de justicia, Patricia González. Es considerado heavy en esos menesteres. Su trabajo le llevó a exiliarse en El Paso, donde radica todavía. Es tratado “personalmente” por el city manager. Convierte en viral hasta la pisada de una mosca, dicen.
Rojero en el estado es soft pero tiene un equipo rudo que se ocupa de sacar trapitos al sol de los enemigos del nuevo amanecer. En menos de una hora suben hasta 500 comentarios a favor o en contra, principalmente en Face y Twitter. Son también expertos en memes, textos “divertidos” y en meter las narices en computadoras, teléfonos y cuentas electrónicas.
Nos dicen que ambos equipos, el de la alcaldía y el del gobierno, tienen roces frecuentemente pero nada qué ver con su potencial en acecho; lejos del estilo China-Estados Unidos aunque muy efectivos para su territorio, el estado grande.
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El logo multicolor tipo arco iris usado por el régimen que encabeza el gobernador Javier Corral atraviesa por mal momento. Nos cuentan que sus creadores lo registraron para una empresa particular debido a que la Coordinación de Comunicación Social rechazó el pago correspondiente.
Nos dicen que las pulgas del titular de Comunicación, Antonio Pinedo, no estuvieron de ánimo en pagar más de un millón de pesos por el logo, pero sus creadores buscaron más de dos milloncitos .
La empresa en cuestión sería Extensión Urbana S.A. de C.V., de Raúl Sandoval Aragonés, misma que efectivamente aparece en la página de transparencia del Gobierno estatal con un mínimo a cobrar por aproximadamente 950 mil pesos y un máximo cercano a los tres millones. Seguro a Pinedo le subieron la cifra al máximo y no quiso pagar.
El asunto es que el loguito multimencionado aparece ya en toda la documentación y publicidad de la administración corralista y no les queda más que pagar, independientemente de que la imagen ya no sea propiedad del Gobierno estatal...¡o del pueblo de Chihuahua!, con cuyo dinero deberá sufragarse.
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La senadora chihuahuense, Graciela Ortiz González, hizo visita de doctor el jueves por la noche a esta frontera. Tuvo cónclave con los hiperactivos miembros de su equipo, aún lampareados por el nombramiento de su jefa como delegada del Comité Nacional del PRI en Guanajuato. (Ya se hacían los querubines en la presidencia del Comité Directivo Estatal...y posiblemente lo consigan aunque no con la jefa al frente).
Graciela checó el estado de salud político de sus seguidores en Juárez. Los encontró bien, sorprendidos únicamente por el movimiento hacia Guanajuato pero listos para ser tomados en cuenta en la integración del Comité Estatal ya en puerta, y sobre todo, en las candidaturas a la vuelta de la esquina, 2018.
El equipo se reunió en la residencia del exsobrino de Palacio de Gobierno, Nacho Duarte Murillo. Hubo representación del grupo duartista-serranista en la persona del síndico, Arón Yáñez Limas.
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Otro que no descansa en su afán de resucitar aunque sea de senador, es el exalcalde, Héctor “Teto” Murguía Lardizábal. Ayer fue tratado como líder, sensei y hasta maestro de la política por los comensales de La Parrillada, ahí por la avenida De la Raza. Todo mundo corrió a sus brazos.
Murguía llegó acompañado de Jaime Flores Castañeda, el exdirigente municipal del PRI, actual subdelegado del Infonavit en esta frontera. Hablaron de grilla, no de casas.
El expresidente municipal autor del ¿memorable? Plan de Movilidad Urbana no da su brazo a torcer para las elecciones del año próximo. Senador, diputado federal, diputado local; lo que sea, menos regidor, para no estar cerca de Cabada si este logra la reelección.
Nos dicen que Teto es de los pocos priistas que ha podido colarse a una audiencia con el panista gobernador, Javier Corral, a quien habría corrido “la cortesía” de informar sobre sus intenciones electorales futuras. Son cuatitos desde hace buen tiempo.
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Varias ocasiones mencionamos en este espacio que Luz Estela Castro, “Lucha”, sería integrante del Consejo de la Judicatura. El 11 de abril pusimos el siguiente parrafito: “entre los grupos de mensajes diversos apareció de nuevo la candidata a consejera de la Judicatura y operadora corralista, Lucha Castro: “es importante fortalecerlo ante la campaña de desprestigio que sufre”. Ella hizo durante años el papel de mamá cuervo del gobernador y se avocó a defenderlo de todo y de todos, justificada o injustificadamente. Por fin le llegó el premio: jefa del Poder Judicial.
Ayer el gobernador del estado la designó integrante del Consejo de la Judicatura, órgano que viene a ser colocado por Javier Corral Jurado como la máxima autoridad en el Tribunal Superior de Justicia, por encima del pleno de magistrados.
Corral nombró a Lucha, el Congreso del Estado hizo lo propio el jueves con Joaquín Sotelo; y ohhh, ironías, el pleno de magistrados designó ayer tarde a dos más de quienes serán sus nuevos jefes (Pablo González y Roberto Siqueiros). Con eso se completa el círculo de los cinco miembros de ese nuevo órgano judicial. Lo encabezará el presidente del TSJ, Julio César Jiménez.
Un Consejo a modo del gobernador, los cinco integrantes son piezas de su equipo. Objeciones técnico-jurídicas acaso a Lucha (más el pero ese de la edad); los puntos no son esos sino las formas arcaicas y caciquiles para los nombramientos. De algo se debe enorgullecer el nuevo amanecer, de superar con esas prácticas al Chihuahua Vive de César Duarte Jáquez.
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No es todo para la comunidad del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
En los pasillos de su edificio se dice que ya preparan la prejubilación del magistrado presidente Julio César Jiménez Castro; los encargados de la operación son el director administrativo, Francisco Molina Ruiz; y la secretaria general, Norma Angélica Godínez Chávez.
Obviamente la intención de ambos funcionarios, colocados ahí por la mano de Corral, es abrir camino a uno de los propios e irse sacudiendo a los magistrados que llegaron durante el duartismo.
Tendrán mucha chamba para conseguir eso; necesitan el aval de las dos terceras partes del pleno, algo que aún no tienen asegurado.
Antes de que caiga Jiménez Castro, ya se empezaron a manejar tres nombres para sucederlo: el que podría ser el candidato de unidad es el magistrado de la séptima sala penal Pablo Héctor González.
También candidatearán a Marco Tulio Cano Corral, que recientemente fue ratificado en la primera sala penal con sede en esta ciudad y el otro es Leo Alvarado, magistrado de la sala de control constitucional, gente muy cercana al malogrado José Miguel Salcido Romero y el PRI, que olvidó su pasado tricolor y ahora juega de todas todas con el nuevo amanecer; es decir, “se hizo pa` donde calientan gordas”.
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El sindicato del Colegio de Bachilleres ya prepara una denuncia de tipo administrativo en contra de la directora general, María Teresa Ortuño, independientemente de la solicitud de su despido, que firmará la base trabajadora.
La acusan de no hacer los depósitos para garantizar prestaciones, ahorros, entre otros conceptos a que estaban acostumbrados los profes y administrativos de este subsistema.
Ayer, Ortuño no daba cuenta sobre qué hizo con los 22 millones de pesos que fueron descontados a los trabajadores en los últimos cuatro meses, pero que no fueron reportados al ISSSTE en lo referente a la seguridad social y al pago de los créditos de vivienda.
La historia entre el sindicato y Ortuño tendrá varios capítulos más; se esperan choques más intensos.