LA COLUMNA
De Los Reporteros
– La gente rumora cobro en estacionamientos
– Primeros candidatos a rectoría de la UACJ
– Sube al PAN nacional alboroto por Auditoría
Dice el independiente alcalde, Armando Cabada, que su reelección dependerá del éxito en la concesión del alumbrado público juarense a una empresa particular. El peligro que le bajen el switch de su futuro político es superior al 90 por ciento aunque la expresión haya sido en broma.
El tema no huele nada bien. Nos parece que “alguien” o “algunos” en el Municipio y fuera de él están descuidando los pesos para ir por los centavos.
Está fuera de toda lógica montar un proyecto multimillonario a otro proyecto idéntico sin conducirnos a creer que la transa es monumental. Puede ser un negocio lucrativo muy apetitoso y urgente para algunos, pero puede ser el más sonado fracaso político para otros, específicamente para quien busca la gubernatura.
La Secretaría del Ayuntamiento tiene agendada sesión “extraordinaria” del Cabildo para el lunes próximo a las 12 horas. En el orden del día aparece la aprobación, o mejor dicho ratificación, para la creación de la Judicatura estatal... y enseguidita la autorización para concesionar el servicio de alumbrado público sepan Rodolfo “El Güerito” Martínez y sus socios qué empresa.
Ese solo hecho haría levantar las cejas a varios, pero que traten de gastar más de mil millones de pesos para reemplazar lámparas que debieron haber sido sustituidas el año pasado sin esclarecer ni denunciar el robo, es más que mala espina. Huele poquito peor que los alrededores de las plantas tratadoras.
El propio presidente municipal Cabada ha revelado que de 30 mil lámparas cambiadas no funcionó ni el 50 por ciento, lo cual quiere decir que hay un robo multimillonario. El Municipio aventó sobre la espalda de los juarenses un crédito bancario por 320 millones de pesos más otros 28 millones que salieron directo de las arcas municipales; o sea... ¿348 millones a la basura, más los correspondientes intereses?.
Alguien debe ser crucificado y no precisamente Jesucristo. Es impensable que el Municipio reciba autorización para ese proyecto sin antes aclarar lo ocurrido con IntelliSwitch y compañía... pero está en la orden del día para el lunes.
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El propio Armando estaría sucumbiendo a la supuesta presión para regresar el cobro en los estacionamientos de los centros comerciales de la ciudad.
En abril del año pasado, la Presidencia Municipal de Juárez hizo efectivo el reglamento municipal que considera ilegales esos cobros. Algunas empresas consiguieron amparos de jueces federales, pero luego los asuntos se fueron a revisiones constitucionales con dictámenes que se mantienen todavía bien guardaditos.
Cabada prometió desde su campaña electoral, y lo ratificó ya como presidente municipal, que rechazaría cualquier intención que pretendiera volver al cobro.
Sabemos que los empresarios no han quitado el dedo del renglón por la simple razón de que los cobros les representan imperdonables ingresos por decenas de millones de pesos.
El reglamento municipal sigue siendo igual de claro: es ilegal el cobro, a menos que los procesos de amparo u otra equis razón de peso en metal hayan ablandado la postura de los independientes y salgan mañana con que no pueden hacer nada.
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Allá por debajo del agua ha corrido la versión de que Carlos González Herrera renunció a la Subsecretaría de Planeación del Gobierno estatal para ser metido en la baraja que disputará la rectoría de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
Encima de esa versión está la que conocemos: casi fue sacado en peso por el secretario de Educación, Pablo Cuarón y por el subsecretario de Educación Media, Miguel Ángel Valdés, el exrector de la Universidad Lasalle en la ciudad de Chihuahua. No había ninguna compatibilidad entre los tres; el hilo roto por lo más delgado.
La elección para rector en la máxima casa de estudios es el año próximo, casi al mismo tiempo que la elección constitucional para elegir presidente de la República, senadores, diputados, alcaldes, etc. La competencia ya está en marcha.
Nos dicen que son muchos los tiradores para la silla del actual rector, Ricardo Duarte: además de González, aparecen Víctor Orozco (pieza de Víctor Quintana), David Ramírez Perea, Ernesto Morán (pieza del gobernador Corral), Javier e Ignacio Camargo (piezas de don Carlos Silveyra).
Luego nos metemos en ese análisis más a profundidad, no sea que las delicias cuaresmales ocasionen estropicios a los estómagos universitarios de vacaciones.
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La suicida guerra librada entre los azules de Chihuahua por el suculento filón de poder llamado Auditoría Superior del Estado (ASE) ha escalado a la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN) en el país. Nos aseguran que la alcaldesa chihuahuita, Maru Campos, ya fue con el chisme en favor de sus muchachos en el Congreso del Estado.
Ricardo Anaya fue llamado a poner atención con lo que ocurre en Chihuahua en momentos que su interés permanecía fijo en la Semana Santa y en revisar las estrategias de la campaña electoral en el Estado de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz.
Ahora deberá el líder blanquiazul participar en la controversia de la que debe surgir una decisión a más tardar el lunes próximo.
Anaya fue llamado también por sus compañeros panistas del Congreso del Estado para que intervenga como árbitro ante la severa confrontación que mantienen con el gobernador, Javier Corral, por la elección de Ignacio “Nachito” Rodríguez como nuevo auditor estatal. El gobernador lo mantiene vetado.
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Los diputados panistas que mantienen el control del Congreso no tienen intenciones de bajar bandera al nombramiento aprobado hace una semana. Lo consideran legal aunque haya fraude comprobado de por medio: el auditor “ocultó” en su currículum que fue candidato a diputado de su partido y el Instituto Estatal Electoral fungió como su cómplice certificándolo documentalmente.
Ese es el motivo por el que Corral mantiene vetada la designación. Jurídicamente ese es el hecho insuperable para los diputados; lo saben pero dejaron en stand by las cosas con la intención de ganar tiempo hacia la decisión política que viene. Ni playa pero tampoco días santos de guardar. Entre hoy, mañana y el domingo les estarán faltando hojas en los rotafolios para dibujar los escenarios que vienen.
El gobernador hará su mayor esfuerzo por reencauzar a sus dos candidatos: Armando Valenzuela y Manuel Siqueiros, derrotados por “Nachito” y los diputados panistas opositores a Corral (más el apoyo de diputados originados en el duartismo), pero en el Congreso seguirán rechazando esas dos alternativas.
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Mientras tanto, es claro que “Nachito” permanece en plena rebeldía ocupando ilegalmente oficina y cargo para el que fue designado por el Congreso. Su nombramiento no es válido porque no ha sido ratificado el decreto correspondiente a través de la publicación indispensable en el Periódico Oficial del Estado.
El “funcionario fiscalizador” del Congreso está firmando documentos y representando a la Auditoría en eventos oficiales, elementos enlistados por el gobernador Corral para justificar una posible intervención policiaca en ese órgano.
El anterior auditor superior, Jesús Manuel Esparza, fue prácticamente sacado de su oficina mediante la fuerza pública. Oficinas, documentación, servidores y computadoras fueron ocupadas por agentes de la Fiscalía frente a la eventual “sustracción” de información sobre “la corrupción” del régimen anterior. Rodríguez sufrirá idéntica suerte si trata de seguir engañando al mundo con que sólo el Congreso puede “destituirlo”.
Pasó una historia muy similar con Sérbulo Lerma, luego con Jesús Esparza, de hecho también con el interino Armando Valenzuela, y ahora con “Nachito”. ¿Pues qué maldición tendrá esa Auditoría Superior del Estado?.
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