La Columna

De Los Reporteros

La situación de los colectores de aguas residuales está para dar terror… aparte de vergüenza.
Los hundimientos están a la orden del día y la sensación del ciudadano es que le puede tocar la de malas en cualquier momento.
Ayer la escena estaba para llorar: el camión de Obras Públicas que acudió a hacer la repavimentación en un tramo donde colapsó el colector de la avenida Gómez Morín, se hundió antes de poder realizar los trabajos, ahí donde ya son incontables los colapsos.
Pero no sólo ha habido sustos y accidentes con daños patrimoniales considerables, o congestionamientos viales porque deben cerrarse las calles por las reparaciones que no terminan nunca; incluso se han perdido vidas por ese tipo de colectores estropeados.
No puede olvidarse la tragedia de octubre de 2007, cuando una pequeña de 12 años, Jazmín García Baca, fue literalmente tragada por la corriente en un sorpresivo hundimiento, cuando caminaba con su madre sobre el camellón de la avenida Ejército Nacional.
Un hombre de 32 años vio los hechos desde la rutera en que viajaba y no la pensó dos veces para lanzarse al colector e intentar salvar a la niña. Pero murió ahogado, igual que ella. Hoy una calle lleva su nombre, el de Andrés Castro Azcárate, en honor al espíritu heroico que le costó la vida.
Y así hay otras historias de miedo que han vivido automovilistas que de pronto han estado a punto de hundirse en el agua cuando cede el pavimento o el concreto de las calles sobre los socavones que generan los colectores desgastados y deshechos por el flujo del agua, los químicos y otros materiales arrastrados hacia las alcantarillas.
Lo que se ha evidenciado con tanto incidente es que se han tomado soluciones parciales o demasiado cortas para el tamaño del problema. Los parches no sirven en esos colectores y las inversiones raquíticas apenas y han servido para sustituir unos cuantos kilómetros de una red obsoleta que cruza toda la mancha urbana.
Es una verdadera maldición para la ciudad que no sólo debe sufrir por el ignominioso estado de sus vialidades llenas de hoyancos y megabaches. Lo peor está debajo de esas trampas.

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Pero en fallas no paramos. Los apagones constantes en varios sectores de la ciudad siguen causando estragos sin que la Comisión Federal de Electricidad dé explicaciones convincentes de lo que pasa. Desde antier hubo interrupciones en zonas bien consolidadas para los servicios, la salud, el turismo y el comercio, como lo es el área del Pronaf, pero ayer los cortes de plano dejaron inoperante durante varias horas una parte del edificio de oficinas estatales ubicadas en la avenida Lincoln.
Los funcionarios tuvieron que cerrar las puertas de algunas dependencias que más afluencia presentan, como Recaudación, Licencias y Registro Civil y afuera se quedaron usuarios y contribuyentes echando chispas… y eso que no había corriente.
Fue preferible decirles que regresaran después porque el coraje podía ser doble si esperaban en vano. Hasta las 14:30 horas volvió la energía eléctrica pero los sistemas para cobros y trámites todavía se llevaron horas en ser habilitados.
Se entiende que puedan ocurrir apagones por accidentes, o sobrecargas que hagan tronar los transformadores (ayer se habló de dos de ellos con desperfectos) pero que esos problemas se vuelvan comunes es inconcebible para una ciudad que requiere ser más competitiva.
Para la CFE ni siquiera existía ayer reporte de alguna falla cuando las oficinas estatales se quedaron sin luz por cuatro horas. A menos que como dijeron en la paraestatal sea “un problema de ellos”. No extrañaría por los vicios ocultos que le han resultado a esa edificación que es relativamente nueva, aunque se supo que algunos comercios y hoteles de la zona también resultaron afectados. Como quiera que sea hay funcionarios que no están haciendo bien su trabajo.

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Vaya que el proceso de consulta para la actualización del Plan de Desarrollo Urbano ha confrontado a muchos actores con intereses inmobiliarios y/o políticos distintos.
Miembros de la Cámara Nacional de los Desarrolladores de Vivienda (Canadevi) han puesto el grito en cielo ante los candados que por fin se pretenden poner al desarrollo disperso, ya que tienen negocios en puerta y han adquirido en los más alejados páramos del sur y suroriente mucha tierra para fraccionar.
Hasta los regidores andan enfrentados porque algunos de ellos, como el tricolor Alejandro Seade, expresidente de Canaco, intenta echar abajo la idea que apoyan desde el alcalde y los técnicos del IMIP hasta la mayoría de los ediles en atención a esa añeja petición de frenar el alto costo económico y social que implica desdoblar la ciudad antes de consolidar lo que ya está urbanizado.
Pues al debate y al pleito de intereses le entró ayer la diputada local electa Adriana Fuentes Téllez. Trae la bandera de la defensa del Distrito 10, dice, al que va a representar y que alcanza gran parte de la zona del Valle y del suroriente, donde se han construido fraccionamientos prácticamente en medio de la nada, justo en la ruta de Ciudad Universitaria, la obra cumbre de esa política especulativa y de dispersión que se supone que ahora se intenta frenar.
Fuentes se reunió con el alcalde Javier González Mocken para pedir que no se deje morir a esos fraccionamientos olvidados pero también reclama el hecho de que existan planes de inversión hacia otro de los polos de la dispersión, la zona de Jerónimo que se lleva el campeonato en eso de incubar negocios privados con el disfraz del interés público.
Y aunque la diputada electa carga ya la representación popular, nadie desconoce que también representa un interés empresarial de su familia.
A ver cómo se concilian tantas visiones diferentes. Por lo pronto trascendió que formalmente, a un día de que se cierre el período de consulta sobre el Plan de Desarrollo Urbano Sustentable, se han recibido 139 propuestas.
De ese total, 56 fueron recibidas tras la primera audiencia pública sobre el documento, 49 después de la segunda, así como 34 en las mesas de trabajo.
Las propuestas las están recibiendo y procesando tanto la Dirección de Desarrollo Urbano como el Instituto Municipal de Investigación y Planeación.
El documento final quedará listo en dos semanas más. Faltará que sea presentado y votado en Cabildo.

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Quien estuvo convocando ayer a la clase política tricolor (especialmente funcionarios de primer nivel del Municipio y del Gobierno del Estado) es el alcalde Javier González Mocken.
Anda organizando una comida en el Centro Recreativo Las Fuentes que podría contar con la presencia del gobernador César Duarte. Aunque algunos dicen que se trata de una especie de despedida-agradecimiento por parte del edil, hay quienes señalan que es parte de su ya acelerada precampaña para el 2018.

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Todos los priistas que ganaron cargos de elección popular el pasado 5 de junio tendrán encerrona hoy en la Ciudad de Chihuahua.
El Comité Directivo Estatal que encabeza Guillermo Dowell los está citando en el edificio del PRI para dos jornadas, el viernes por la tarde y el sábado por la mañana, de intensiva capacitación sobre lo prioritario de sus funciones.
Ahí estarán todos los electos: alcaldes, diputados, síndicos y regidores. El sábado después del curso también están invitados a una comida con la bancada de diputados chihuahuenses tricolores en San Lázaro.

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Mañana sesiona el Instituto Estatal Electoral. Dará a conocer la asignación de diputados plurinominales. Será de escasa significancia lo que digan los señores consejeros, lo que resuelvan será llevado a tribunales por más de dos partidos que se vean agraviados.
De entrada PRI y PAN irán contra corriente, pues ha trascendido que los dejarán sin espacios ‘pluris’. Ninguna sorpresa, seguro ambos tienen preparadas las impugnaciones, con la diferencia de que la del PRI llegará por la vía de Víctor Valencia como tercer interesado, quien pretenderá llevar el caso directo a los tribunales en Guadalajara, obviando el resultado negativo de Chihuahua. Otra vez los abogados. La impugnación es divisa barata en el proceso electoral que no acaba.

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Quien presumió ayer un logro académico, fue la senadora juarense Lilia Merodio Reza.
Presentó su trabajo de titulación como maestra en Derecho. “La evolución de la figura de la reelección en el sistema constitucional mexicano”.
Luego de dos años de estudios de maestría, el sínodo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Facultad de Estudios Superiores Acatlán, integrado por Jorge Fernández Ruiz, Pedro Miguel Ángel Garita Alonso, Pedro López Juárez y Ángel Zarzúa Martínez, aprobó con Mención Honorífica la investigación de la senadora Lilia Merodio Reza, obteniendo así su grado de maestra.
Concluida esa etapa de formación, la senadora todavía tendrá más oportunidad de moverse por la dirigencia del Comité Directivo Estatal. Para la siguiente semana ya tiene agendado un recorrido por varios municipios (empezando por Jiménez) en donde aprovechará para hacer cabildeos y amarrar alianzas al tiempo que inaugura algunas obras producto de recursos que gestionó desde el Senado.