La Columna

De Los Reporteros

-Campañas pro desaparición de las cuotas escolares, un daño que cada vez afecta a más planteles; el Partido Verde presumió electoralmente autoría de esa medida, pero nunca gestionó recursos para paliar la ausencia de las aportaciones

-También en el PRI había oposición para la reforma electoral del estado; el diputado Eloy García Tarín considera lo aprobado un despropósito

Cuánto daño puede hacerse con campañas que supuestamente promueven un bien cuando en realidad están provocando un mal. Tal es el caso de la supuesta desaparición de las cuotas escolares o de la obligatoriedad de los padres de familia para aportar en el mantenimiento de los planteles escolares.

Muy orondos presumen los dirigentes y militantes del Partido Verde Ecologista de México que ellos sí cumplieron al desaparecer las cuotas escolares. Quién no recuerda el spot de televisión en el que una madre de familia reclama a un maestro que aparentemente no permite el ingreso de un estudiante a la escuela porque ella no ha aportado la cuota y ella le dice que mejor pregunte, porque ya es ley que las cuotas no son obligatorias.

Qué bueno que los gobiernos aportaran recursos suficientes para el mantenimiento de los planteles escolares y que los padres no tuvieran que poner de su dinero para ese fin. Los legisladores del Verde, y de otros partidos que también abonaron en ese sentido, hubieran legislado para que en el presupuesto se incluyeran partidas suficientes al menos para el pago de los servicios básicos de agua, luz y gas, dotación de aire acondicionado y calefactores, entre otros para todas las escuelas del país. Pero no, únicamente se refirieron a la desaparición de las cuotas, sin pensar en las consecuencias de esa medida. Los gobiernos –federal y de los estados– tampoco han tomado medidas al respecto y han dejado en manos de los directivos de las escuelas la responsabilidad de allegarse recursos a como se les dé entender, pero con la predisposición de un gran número de padres de familia a pagar las cuotas.

Hoy podemos ver el resultado de esa medida tomada al calor de las campañas políticas, al menos la mitad de los progenitores no aportan a las escuelas en las que estudian sus hijos, aún aquellos que están en condiciones de hacerlo, y esos planteles se quedan sin mantenimiento en perjuicio de todos los menores, los hijos de padres que sí pagaron y lo de quienes no lo hicieron. Ah, pero el Verde conservó su registro, llevará a un buen de sus militantes a la Cámara de Diputados, a ellos lo que ocurra en las escuelas ya ni les va ni les viene. Y mientras, los centros escolares sufren escasez de materiales de limpieza, y en determinado momento ya no pueden pagar la luz o el gas, y en el caso de ciudades con climas tan extremosos como Juárez ya sabemos lo que eso significa: permanecer en los salones de clase suele ser una tortura para alumnos y maestros.

Si bien es cierto que las cuotas no deben ser obligatorias en el caso de familias que no las puedan pagar, quienes sí pueden deben hacerlo, al menos mientras que los gobiernos se aplican y son ellos los que aporten el dinero suficiente para no tener que pedir más.

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El diputado local originario de Balleza Eloy García Tarín ha llamado la atención de la gente de su partido, el PRI, por manifestar públicamente en diversos medios de comunicación su opinión contraria a algunos de los puntos contenidos en la reforma constitucional electoral aprobada el pasado lunes, porque los considera un despropósito.

Sus comentarios ya causaron revuelo en el primer círculo del Poder, pero él dice sostenerse, y asegura que estaba preparado para fijar un posicionamiento personal sobre esa reforma y anular su voto durante la sesión del Congreso, pero no pudo hacerlo debido a que el PAN generó un ambiente de anarquía al intentar reventar la sesión y canceló el debate.

Su manifestación más patente es contra el candado de los tres años de no militancia partidista para las candidaturas independientes, condicionante ausente en la ley la Federal, donde sólo piden que para ser candidato ciudadano no se pertenezca o sea dirigente de ningún partido político al momento del registro.

A Eloy lo describen como un hombre inteligente, con años de institucionalidad priista y conciencia del alcance y las implicaciones de sus declaraciones, sin embargo las mantiene. Esa, dicen, es una señal de que la designación de candidatos para la elección del año que viene no será un paseo por el parque, como sucedió con las diputaciones federales.

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Quien tendrá una participación destacada en la próxima reunión de la CONAGO –Conferencia Nacional de Gobernadores– a llevarse a cabos los días 7 y 8 de julio en Tlaxcala es el titular del poder Ejecutivo en Chihuahua, César Duarte Jáquez.

Aunque durante el primer día la conferencia será atendida por Clara Padilla en representación de Chihuahua, al celebrarse una reunión de logística con los enlaces de los estados, ya por la tarde Duarte tendrá una participación activa al frente de la Comisión de Seguridad y Justicia, que él preside. Durante la noche se tiene prevista una cena privada con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

Para el 8 de julio será la Reunión Plenaria Privada de Gobernadores, a la cual arribará el presidente Enrique Peña Nieto.

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Tal parece que no hay en el Gobierno Municipal un dique que contenga las expresiones fuera de lugar de algunos funcionarios, sin escapar siquiera el propio alcalde Enrique Serrano Escobar. Después de tanto ruido que se generó por la supuesta disposición para clausurar las casetas de cobro en los estacionamientos de los centros comerciales y otro tipo de establecimientos, ahora resulta que el Municipio carece de facultades para regular esa situación. O sea que ni tenían vela en el entierro y estaban llorando por el muerto.

Ahora todo quedó en un simple y llano exhorto a los propietarios de esos negocios para que cuenten con el personal y la tecnología necesaria que garantice la seguridad para el resguardo de los vehículos que ingresen a los estacionamientos que operan bajo el sistema de pago. Los conmina a contratar seguros contra robos, cuando ya la mayoría cuentan con esa protección. Además, los llama a establecer una cuota única diaria consensuada con la autoridad. A ver si de esta manera obtienen mejores resultados que con las amenazas que profirieron anteriormente, sin siquiera tener facultades para hacerlo.

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A 21 meses de la tragedia del festival Extremo Aeroshow 2013 en la presa El Rejón, en la que perdieran la vida 9 personas y 58 resultaran lesionadas, finalmente se dio el primer fallo en contra de uno de los involucrados: el piloto de la troca monstruo Francisco Velázquez Samaniego. En un juicio abreviado, éste fue encontrado culpable de homicidio imprudencial y sentenciado a cinco años de cárcel y pagar una indemnización superior a los 24 millones de pesos. Además, la Jueza que llevó el caso consideró que Velázquez Samaniego, mejor conocido como Panchito, no es candidato para purgar su condena en libertad, por lo que continuará en prisión.

En su resolución, la juzgadora argumentó que Panchito debió abstenerse de conducir al vehículo denominado “Big Show” porque conocía las fallas en materia de seguridad y por las condiciones de salud que presentaba desde entonces, pues padece diabetes e hipertensión, lo cual lo descalificaba físicamente para las maniobras que realizaría en el espectáculo.

Si bien se pudiera estar de acuerdo en las consideraciones que tomó en cuenta la juez, es un hecho que hay personas con mayor responsabilidad en lo ocurrido y que hasta ahora no han sido tocadas por la “justicia”. ¿Por qué quienes organizaron ese evento sin proporcionar las medidas de seguridad adecuadas llevan el juicio en libertad a diferencia de Velázquez, quien no tenía responsabilidad directa en ello? Lo mismo va para quienes contrataron a Panchito a sabiendas de que no estaba apto para conducir un vehículo con la potencia y las características de la troca monstruo y para las autoridades que dieron las autorizaciones correspondientes para el desarrollo del AeroShow. En casos como el actual es donde se percibe claramente que el hilo se rompe por lo más delgado, por eso la expresión de Panchito al ser sentenciado tiene mucho de razón: “es injusto que ellos estén afuera y nada más yo adentro”.