La Columna

De Los Reporteros

-A pesar de broncas y conflictos, priistas se unen para apoyar a sus candidatos en campaña; da frutos aquel acercamiento entre el gobernador Duarte y Reyes Baeza

-En Morena, a pesar de ser un partido de nueva creación, con menos militantes y, se supone, menos intereses creados, hay divisiones entre candidatos

-Nerviosismo en el PAN al considerar que no hay condiciones para hacer campaña en la sierra

El desayuno donde Reyes Baeza y César Duarte se reencontraron, en casa del primero, empieza a observar resultados prácticos para los candidatos del PRI, especialmente en Chihuahua y Delicias. La cena que Marco Adán Quezada ofreció para Liz Aguilera y Alejandro Domínguez la semana pasada es sólo una muestra de lo que prepara hacia el sábado 16 de mayo, en Delicias con dedicatoria a Tony Meléndez y en el Centro de Convenciones para los candidatos de Chihuahua.

La organización del evento está en curso, aseguran que hasta Víctor Valencia estaría involucrado, pues no asistió al histórico desayuno, siendo uno de los invitados, así que ahora obligado está a pasar por su ración de camote y fingir que lo disfruta. La legión chihuahuita en México, que orbita en torno a Reyes Baeza, tendrá su prueba de fuego, organizar actos bien presentados sin los recursos del poder nunca ha sido fácil.

¿Se darán por bien servidos los candidatos y el partido en Chihuahua con la aportación de los reyistas? Paciencia, faltaría ver cómo pinta, luego resulta que apantallan a los candidatos en campaña y se arma el batidillo que a la postre resulta contraproducente. Los sonoros aplausos a Marco Adán en la presentación de Alex Domínguez no garantizan que hayan quedado vacunados, necesitan trabajar cada evento en particular si quieren evitar expresiones de esa naturaleza que terminan por dividirlos aún más.

De cualquier forma el grupo de Reyes ha mostrado –al menos en la superficie– legítima preocupación por el resultado de las campañas en Chihuahua, siente que cumple con su partido y con el presidente Peña, mensaje que envía al Centro diciendo “por nosotros no quedó”, en la eventualidad de posibles derrotas fuera de guión. ¿Se la estarán creyendo? Vaya usted a saber, en política la simulación es un arte y todos son lagartones en ese depurado juego.

Con independencia de las motivaciones que Marco y Reyes encuentren para trabajar en campañas que no les pertenecen, Liz, Alejandro y Tony Meléndez deben aprovechar la oportunidad de las audiencias que tendrán frente a ellos. Los tres se sienten seguros de ganar, son profesionales de la política unos… y del canto el tercero, por lo que tienen buen manejo ante el público, obtener ventajas para su proyecto es obligación de ellos y de nadie más, seguro lo harán.

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En donde parece que hay un rompimiento es entre los candidatos a diputados federales por Morena en esta frontera. Al menos así lo da a entender un post en Facebook del candidato por el distrito 02, Andrés Carbajal Casas, quien firma sólo con su nombre y el de los postulados por los distritos 03 (Bertha Caraveo) y 04 (Roberto Vázquez Molinar), deja fuera a María Dolores Adame Alvarado.

Dicen que esta última trae mucho más movimiento en su campaña, totalmente por tierra, y que ello ha despertado el celo de Carbajal Casas, quien en su comentario en la red social comenta: “En el comité de campaña del Distrito 02-Morena no queremos grillos trasnochadores y de parranda, no queremos caciques ni sectarios, no nos interesa la presencia de yoyos ni sectarios, repudiamos la simulación y el avasallamiento… Rechazamos categóricamente mafias y mesiánicos”.

Hay quienes consideran que esas expresiones están dirigidas a Gustavo De la Rosa Hickerson, a quien no le perdonan que haya sido designado candidato plurinominal, y quien es uno de los principales apoyadores de Adame Alvarado, en su campaña en el distrito más extenso, el 01, que además de Guadalupe y Práxedis, en el Valle, y parte de Juárez, comprende Villa Ahumada, Janos y Ascención, poblados en los que “El Pichú” tiene mucho trabajo con la gente. Así las cosas en ese partido, que en Juárez realmente no tiene mucho arrastre, como para que todavía los esfuerzos se atomicen en peleas estériles. Pues qué no ven cómo en el PRI, a pesar de todas sus broncas, a la hora de la hora van unidos. Así es la política.

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En otros asuntos de campañas, las noticias llegan desde la sierra. El PAN de Mario Vázquez muestra preocupación por el clima de inseguridad en Guadalupe y Calvo, así como en otras poblaciones menores de la sierra. Consideran que no hay garantía para la jornada electiva, pues si sus candidatos no han podido penetrar esas zonas, menos su aparato electoral, es decir, representantes de casilla y demás colaboradores.

Quizás el comentario sea mera distracción o un ejercicio de calzarse el guarache antes de la espina. No obstante, si la sensación del jefe panista encuentra realidad social en esas comunidades, bien harían en tomar sus providencias, porque contra las fuerzas del mal no hay antídoto.

El tema les preocupa en razón de que con frecuencia suelen ganar holgadamente cabeceras distritales, pero de los municipios rurales les llegan carretadas de votos en contra que revierten la elección. El fenómeno electoral es bien conocido por los estrategas panistas, sólo que no encuentran la forma de conjurarlo, por eso sufren tanto, nada más de imaginar lo que han padecido en elecciones pasadas.

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Y si en lo político las campañas tienen sus asegunes, en materia económica no se diga. La mayoría de los candidatos de casi todos los partidos no tienen acceso a los recursos que las autoridades electorales destinan para que puedan llevar a cabo sus actividades de campaña. En palabras llanas, los contendientes tienen que rascarse con sus propias uñas, porque de los millones de pesos destinados a ese fin –la mayor parte del pastel– se los quedan los partidos y a ellos les dan sólo migajas.

En el mejor de los casos, a un candidato –del PRI, que son los que gozan de mayores prerrogativas– que debió recibir aproximadamente un millón de pesos le fueron entregados sólo 400 mil, mientras que a otros –de los partidos menores, por llamarlos de algún modo– ni un plano del distrito para recorrerlo y solicitar el voto les entregaron las dirigencias partidistas.

La entrega no siempre es en efectivo sino principalmente en especie, con artículos utilitarios como camisetas y gorras, aunque algunos ni eso han visto, hacen campaña literalmente a pie.

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El conflicto que se vive en el fraccionamiento Urbiquinta Granada, ubicado a espaldas del centro comercial Gran Patio Zaragoza, por la permanencia o no de las rejas y la caseta ubicadas en los accesos, se ha alargado ya por varios meses y de acuerdo con una de las partes en conflicto, ello se debe a que las autoridades municipales no le han querido entrar al toro por los cuernos debido a que, dicen, la presidenta del comité de vecinos, Vanessa Murillo, es empleada del Poder Judicial y protegida de una magistrada de tribunal unitario de nombre Avelina Morales.

Este conflicto tiene su origen en un pleito casi personal entre Murillo y el anterior presidente del comité de vecinos, Lázaro Armenta, y los perjudicados son el resto de los vecinos de ese desarrollo habitacional.

Comentan que no obstante que las autoridades municipales le dieron la razón a la contraparte, y que en al menos cuatro ocasiones le ha ordenado a Murillo retirar las rejas y eliminar la caseta, hasta ahora ella ha impuesto su ley y las cosas siguen como cuando inició esta disputa.

El caso estuvo primero en manos de Desarrollo Urbano y su titular, José Eleno Villalba instruyó el retiro de las rejas, pero no se cumplió. El caso pasó a manos de Dante Gilberto Acosta Camacho, director jurídico, quien también giró una orden similar, que igualmente fue desacatada. Después lo tomó ya directamente el secretario del Ayuntamiento y las cosas, hasta ayer, seguían igual.

Luego de todas esas acciones frustradas por parte de las autoridades, los vecinos que se oponen a la permanencia de las rejas y la caseta consideran que Murillo ha establecido en el fraccionamiento en cuestión un gobierno autónomo, porque la ley y los actos de autoridad se los pasa por el arco del triunfo.