Opinion

La Columna

De Los Reporteros

2015-05-03

-A un mes de campañas, los ciudadanos ni las ven ni las sienten; en cuanto a preferencias, a pesar del optimismo de priistas y panistas, no hay nada para nadie, todavía

-Urge senadora Merodio a que Estado compruebe gasto de los recursos para el Centro de Convenciones; está en puerta el armado del presupuesto 2016 y si no se resuelve ese punto no se incluirán recursos adicionales

-Lamentables la opacidad y discrecionalidad en el ejercicio de los recursos del Pronapred; tampoco hay evaluación del impacto de las acciones financiadas a través de ese programa

Hoy se cumplen un mes de campañas políticas, ¿alguien se ha dado cuenta? La sensación advertida entre la ciudadanía permite suponer que no; la gente no está interesada en lo que hagan o dejen de hacer los candidatos y eso que ahora son noventa los que recorren el estado pidiendo el voto. No se ven, no se sienten ni se oyen.

No hay a la mano encuestas sobre las preferencias electorales a mitad de campaña, seguro los candidatos y sus partidos las tienen, también los gobiernos, pero no han trascendido datos confiables de “la fotografía” a los primeros 30 días, así que ni como especular en torno a retrocesos o avances.

A falta de datos confiables, quedan para el apunte lo que dice cada uno de los interesados.

Desde el gobierno hicieron circular la semana pasada versiones de que el PRI ganará los nueve distritos, según ejercicios estadísticos no revelados. Se sienten cómodos incluso en el 03, 05 y 06, los de mayor competencia histórica y cuyos resultados suelen caer para uno u otro partido.

Mario Vázquez, en cambio, asegura que ganarán el sexto de Chihuahua, con una ventaja de 14 puntos, diferencia que a su juicio les alcanzará para ganar de pasada el octavo, donde afirma que Rosy Baray lleva un punto sobre Alejandro Domínguez. Asegura también que sacarán con holgura el Distrito 03, de Juárez y ve ganado para ellos el 04.

En un ejercicio de optimismo exacerbado, dice Vázquez que por primera vez podrían ganar el Distrito 07 de Cuauhtémoc y el 09 de Parral, supuestamente los dos distritos más cómodos para el PRI, en razón del vasto territorio serrano que los compone.

Desde luego que cada quién promociona a su favor, están en su derecho a decir lo que a sus intereses conviene, Ni modo que a un mes de la elección digan que están perdidos. Sin embargo, el optimismo en ambos partidos podría explicar una elección incierta, con resultados atípicos o bien confirmar la creencia generalizada entre los estudiosos de los procesos electorales, que cuando las elecciones son desangeladas la votación es muy baja y cuando la votación es muy baja, el partido que suele ganar es el PRI.

Esta versión está basada sobre la lógica de que el PRI cuenta con mayores recursos económicos para movilizar gente el día de la elección e incluso inhibir o comprar a representantes de otros partidos.

En esta situación, queda el comentario en un simple nada para nadie, quizás ni los mismos candidatos o sus coordinadores tengan la certeza de sus números, pues en campañas sordas, sin pasión, a la gente le importa un cacahuate lo que hagan los candidatos. Les resulta indiferente, más cuando la violencia asoma su grotesco rostro, como lo hizo en el viernes en Guadalajara y lugares circunvecinos.

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Quien anduvo ayer por esta tierra que la vio nacer es la senadora Lilia Guadalupe Merodio Reza quien, en el contexto de un festejo que organizó con motivo del Día del Niño en el centro recreativo Las Anitas, exhortó al Gobierno del Estado para que compruebe a la brevedad posible en qué gastó los 30 millones de pesos entregados desde 2012 para iniciar las obras del Centro de Convenciones.

Quizás no estaba enterada que el gobierno duartista ya regresó 15 de esos millones, pero para el caso es lo mismo, ya que se tiene que comprobar hasta el último peso para que la Federación pueda aportar mayores recursos para la realización de esa obra que está contemplada en la mesa de Recuperación Económica de Juárez como la prioridad número 1.

La legisladora dijo que está por iniciar la conformación del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2016, la fecha límite para entregar el proyecto es el 30 de octubre, y debe estar resuelta esa situación para que incluyan los recursos para la construcción de ese recinto. De no entregar la comprobación, la financiación federal para el Centro de Convenciones estaría en riesgo.

Hace tres semanas en la reunión interinstitucional de la Mesa, en la Ciudad de México, entre integrantes del Consejo Coordinador Empresarial y funcionarios federales, estatales y municipales, salió a colación que el estado no había comprobado ese gasto. En ese evento, el secretario de Economía del Estado, Manuel Russek Valles se comprometió a cumplimentar ese requisito. Regresaron la mitad de los recursos, pero del resto a la fecha no se ha dicho ni pío.

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Opacidad y discrecionalidad son las características que definen la aplicación de los recursos del Programa Nacional de Prevención del Delito (Pronapred) correspondientes al presente año en Juárez.

Qué lástima que un programa que pretende ayudar a evitar que la violencia y la delincuencia vuelvan a reinar en nuestra ciudad pudiera verse afectado por el manejo tan oscuro que se ha hecho de la aplicación de los recursos provenientes a través de esa vía desde el Gobierno federal.

En la mayoría de los casos se ignora el impacto de las acciones supuestamente emprendidas con recursos de ese programa, porque ni siquiera está claro el destino de esos fondos.

Son más de 80 millones de pesos los que se recibieron en 2014 y sólo de 54 se ha informado a dónde fueron a parar, de los otros 30 mdp no hay claridad en cuanto a su destino. Lo dicho, lamentable.

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Tras el prolongadísimo puente del 01-05 de Mayo, que por fin termina mañana, organizaciones campesinas como el Barzón y otras, preparan manifestaciones a la plaza Hidalgo en la ciudad de Chihuahua, principalmente para protestar por los cortes de energía eléctrica y la ausencia de apoyos federales para el agro.

Sus líderes pretenden aprovechar la vulnerabilidad del gobierno durante el proceso electoral, a efecto de presionar para evitar los cortes y mantener su estatus de no pago, pues ahora las brigadas de la CFE no se dedican a cortar la energía, levantan ramales completos para que no puedan colgarse de nuevo.

Hay muchos productores abusones con capacidad económica sobrada, instalados por decisión personal en la cultura del “no pago”, sobre ellos debería ir la CFE. Pero la realidad también es que el campo mexicano está desatendido, la ausencia de políticas públicas consistentes profundiza la crisis al punto del estallido social. No es un tema menor, la gente se siente agraviada e ignorada, elementos que abonan a la protesta radical. ¡Cuidado, no se puede descuidar de esa manera al campo!

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El anuncio de una licitación para comprar placas metálicas para vehículos motorizados, publicado el sábado antepasado en el Periódico Oficial del Estado, ha generado rumores de que este año sí habrá replaqueo, no obstante el buen recibimiento por parte de los propietarios de vehículos automotrices al engomado que se emitió el año que corre, sobre todo porque costó más barato a los contribuyentes y es mucho más práctico, al estilo Texas y otros estado de la Unión Americana.

Habrá que recordar que el año pasado se tuvo la intención por parte del Estado de vender placas nuevas, pero finalmente en noviembre un juez federal determinó la suspensión definitiva al proceso de licitación para la compra de éstas, luego de que una de las empresas que concursó por el contrato y no ganó, promovió un juicio de amparo contra el Gobierno del Estado después de que éste resolviera en favor de otra empresa la compra de placas para el canje durante 2015.

Pero la publicación de la convocatoria que publicó la Secretaría de Hacienda en el Periódico Oficial, además de que licita la adquisición de juegos de placas metálicas, lo hace también para calcomanías para control vehicular, por lo que también podría ser que se continúe con la venta del engomado para revalidación y que las placas sean únicamente para los autos nuevos.

La cuestión es que para nada se compara en términos de costo la compra de placas metálicas con la de los engomados, y ya se sabe que la adquisición de bienes siempre deja un “algo” para quien licita y por eso los rumores se desataron en el sentido de que podría regresar el replaqueo. Al tiempo.

 

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