William K. Rashbaum / New York Times News Service
2015-06-30
Nueva York— El FBI en Albany, Nueva York, ha abierto una investigación de corrupción en torno a los empleados y reos de la prisión de máxima seguridad en el norte del estado de Nueva York, de donde dos asesinos condenados escaparon este mes, según dijo el lunes un oficial con cierto conocimiento del asunto.
El dramático escape de la prisión, el cual fue descubierto el 6 de junio en el Centro Correccional Clinton en Dannemora, Nueva York, dio inicio a una enorme búsqueda en la que participaron más de mil agentes estatales, agentes federales y otros oficiales de la Policía, misma que terminó cuando el segundo prófugo, David Sweat, de 35 años, fue baleado y capturado a unos 48 kilómetros de la prisión. El primer fugitivo, Richard W. Matt, de 49 años, fue baleado fatalmente el viernes.
La investigación del FBI, de la cual el oficial dijo que estaba enfocada en el tráfico de drogas y en otro posible tipo de conducta delictiva, es muy posible que ponga bajo escrutinio a los oficiales de la prisión, su conducta y la aparente falta de seguridad y supervisión de la institución en los meses precedentes al escape.
Paul Holstein, asesor en jefe divisional del FBI en Albany, dijo que su oficina no confirmaba ni negaba la existencia de tales investigaciones.
Los agentes del FBI han estado ayudando a la Policía estatal y a la agencia penitenciaria del estado en su investigación del escape, y un agente de la oficina del FBI en Albany, Timothy Coll, estuvo presente cuando un oficial de correccionales, acusado de estar implicado en el escape, fue interrogado, de acuerdo a los documentos de la corte. Pero la expansión del papel que está jugando la agencia en una investigación aparte, de la cual el lunes CNN reportó al respecto, no fue revelada públicamente hasta que la búsqueda de los fugitivos terminara.
Las noticias de la investigación federal también salieron a la luz un día después de que el gobernador, Andrew M. Cuomo, reiterara que la inspectora general del estado, Catherine Leahy Scott, estaba llevando a cabo una investigación en torno a los reglamentos y procedimientos de la prisión y las circunstancias que conllevaron al escape de los fugitivos. Cuomo informó por primera vez sobre dicha investigación el pasado 15 de junio.
Los detalles del escape levantaron dudas sobre cómo los oficiales que patrullan el pabellón en Clinton, donde la celdas de Sweat y Matt estaban ubicadas, no se percataran de las preparaciones de los reos, de las que se cree que debieron haberse estado maquinando por varias semanas, quizá meses.