Nacional

Si encontramos trabajo en México, nos quedamos: hondureños

Excélsior

2018-10-18

Ciudad de México.- Un grupo de la Caravana de Migrantes hondureños permanece en el parque central de Tecum Uman, Guatemala, a unos 15 minutos de distancia del paso fronterizo con México a la espera de la llegada de otros de sus connacionales para continuar su camino, algunos ya muestran cansancio.

"La verdad que estamos esperando a los demás porque somos una sola familia aquí en estos caminos y tenemos que irnos juntos. No nos podemos quedar el uno al otro porque aquí encontramos hijos, aquí encontramos padres, hermanos, amigos y nos vamos apoyando el uno a otros, porque todos somos hermanos”, comentó Francisca Cuevas Carrasco, integrante de la Caravana.

Mientras que Jesús España, otro de los migrantes, destacó que en Honduras a los trabajadores se les paga sólo la mitad del salario mínimo, que actualmente alcanza 8 mil 500 lempiras; mientras que el huevo, el aceite, la manteca, el arroz y el frijol, entre otros productos de la canasta básica, se elevan cada mes. “¿O comes o envías a la escuela a los niños?”, dijo.

"Antes se trabajaba para sobrevivir, hoy, en el tiempo en que estamos, los trabajos se han venido deteriorando. Con el trabajo se podía ganar y sobrevivir antes, hoy ya no se puede sobrevivir con el salario, las empresas ya no contratan gente para estabilizarla en un buen tiempo, dos meses, mes cinco días y para fuera la gente”, agregó.

Explicó que la delincuencia se incrementó en honduras por “la misma pobreza de la gente”.

"La gente no sobrevive con lo que gana, después de salir del día van a hacer su picardía para sobrevivir, es uno de los factores que se ha dado más en honduras”, detalló.

Destacó que no tiene papeles para entrar a México, sólo lleva consigo su cédula de identificación personal, por lo que de no entrar a nuestro país, su destino sería volver a su patria.

Hay mujeres, hombres y niños y el principal argumento por el cual salieron de su país, es el incremento de precios de la canasta básica, la baja del poder adquisitivo, la falta de empleo y la violencia. Esperan llegar a Estados Unidos y aseguran que traen con ellos la cédula de identificación personal y algunos portan el pasaporte correspondiente.

Carlos Orellana, otro de los integrantes de la Caravana, y quien en su país trabajaba vendiendo jugos y como ayudante de albañil, resaltó que si encuentra un empleo en México, se queda.

"Si encontramos un trabajo en México donde podamos estar estables y podamos ayudarle a nuestra familia, nos quedamos en México. Nuestra misión es buscar refugio en México, no le podemos afectar tanto a la gente en México, nos queremos quedar”, agregó.

La Iglesia Católica y evangélica dieron comida y agua a los migrantes centroamericanos, así como un lugar para bañarse; incluso, ropa, Los hondureños han caminado por espacio de tres días para llegar a Tecum Uman y otro grupo numeroso de personas partió desde las cercanías de la capital guatemalteca y esperan llegar en el transcurso del día a la frontera con México.

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