Afirma Meade que elección no está definida

Reforma

Ciudad de México— Frente a resultados de encuestas que lo ubican en tercer lugar en las preferencias electorales, el precandidato del PRI, José Antonio Meade, aseguró que quiere acabar con la leyenda urbana de que la elección ya está definida.

"Según la leyenda urbana la elección ya está definida, este arroz ya se coció, ya ni para qué empezamos la campaña porque sabemos qué va a pasar", apuntó.

"Los ingenieros y los economistas saben perfectamente bien que no podemos hacer una regresión con tres datos, pero no deja de ser significativa la maldición del primer trimestre".

En México, aseguró, las tres últimas elecciones han sido competidas, pero el puntero en las encuestas no ganó.

"El puntero del 2000 perdió, el puntero del 2006 perdió y el puntero en el 2012 perdió los 20 puntos que llevaba de ventaja, quiere decir que las campañas sí importan y que esta campaña todavía no empieza", afirmó.

"Entonces hay mucho que ver, por conocer y contrastar para efectos de determinar o tener alguna intuición de qué va a pasar".

Meade se reunió con 350 miembros del Colegio de Ingenieros, a quienes argumentó que Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya son más conocidos porque arrancaron la precampaña -el 14 de diciembre- con millones de spots, y él con ninguno.

Por ejemplo, dijo, el tabasqueño tuvo ascenso -por ser líder de Morena- a 3.7 y 2.4 millones de spots.

Por ello, justificó, lo que están viendo los ciudadanos es conocimiento, que se revertirá en las campañas, confió.

La tercera leyenda urbana que quiere desterrar es que no importa lo que digan los políticos en campaña, pues, agregó, los ciudadanos deberán analizar el contraste de propuestas.

"Hay que creerle a los políticos, por lo que el contraste de propuestas es importante", dijo.

Los directivos del Colegio le regalaron un libro de Vargas Llosa, "Travesuras de la Niña Mala".

"Creo que va a escribir una secuela que se llame 'Malas propuestas del niño peligroso'", ironizó en referencia a la pelea entre López Obrador y el escritor, lo que provocó la risa generalizada.

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