Silvia Garduño/
Agencia Reforma
Ciudad de México— Unos 10 mil 397 secuestros han ocurrido durante la Administración de Enrique Peña Nieto, según la organización Alto al Secuestro.
“Esto equivale a 173 secuestros mensuales, 40 semanales y seis secuestros diarios”, señaló ayer la presidenta de la organización, Isabel Miranda de Wallace.
Alto al Secuestro presentó su informe mensual sobre la prevalencia de este delito, el cual indica que en noviembre hubo 155 secuestros y 184 víctimas privadas de su libertad, un aumento de 14.8 y de 26 por ciento, respectivamente, respecto a octubre de este año.
En números absolutos, en noviembre, la entidad que tuvo más secuestros fue Veracruz, con 31, seguida por Estado de México, con 28, y por la Ciudad de México, con diez.
Sin embargo, si se mide la tasa de secuestro por cada 100 mil habitantes, la entidad que encabeza la lista en noviembre es Zacatecas, seguida por Veracruz y Tabasco.
Si se toma la tasa acumulada durante el sexenio, las entidades con mayor prevalencia de secuestros son Estado de México, Tamaulipas, Veracruz, Guerrero, Ciudad de México, Morelos, Tabasco y Michoacán.
Miranda de Wallace celebró la creación de la Coordinación Nacional Antisecuestro, sin embargo, advirtió que existe el reto de mantener al personal en las unidades antisecuestro (UECS) independientemente de los cambios de gobierno.
“Hacemos un llamado, ahora que va a haber elecciones, que cuando haya cambio de gubernatura, no cambien a los titulares de las UECS, es más, les exigimos que sigan manteniendo las UECS. Muchas unidades antisecuestro se han convertido en unidades de alto impacto, es decir, les meten asuntos relevantes, trata de personas, extorsión y secuestros, ya dejaron de ser especializadas”, demandó.
Polemiza con CNDH y ONGs
Isabel Miranda de Wallace acusó a la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), a Amnistía Internacional y a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de intentar liberar a una presunta secuestradora que alega haber sido víctima de tortura sexual durante su detención.
Durante la presentación de su informe mensual, Wallace estuvo acompañada de una de las víctimas de secuestro de Verónica Razo Casales, Ismael Salinas, quien dijo identificar perfectamente a su secuestradora.
Tanto Wallace como Salinas señalaron que si Razo Casales fue víctima de tortura, en ese caso se tiene que sancionar a los responsables, pero que eso no la hace inocente.
“Hay algunas organizaciones que con muy poca ética dicen defender derechos humanos pero no defienden los derechos humanos de quien verdaderamente sufrió las consecuencias, es decir, de la víctima del delito. Defienden, curiosamente, los derechos humanos de quien agredió a la sociedad. Eso es inconcebible”, afirmó Wallace.