Agencia Reforma
2017-10-02
Ciudad de México— A 49 años de la matanza en Tlatelolco, el Comité 68 tiene dos demandas: que el Gobierno haga justicia y que se tienda un puente generacional con los millennials.
"Se han levantado y se han puesto en pie a partir de estos dos eventos naturales inevitables, pero que efectos si podían ser evitables, entonces, a los jóvenes les decimos: ya levantaron la bandera, no la bajen, construyamos puentes entre todas las generaciones", les pidió Félix Hernández, integrante del Comité 68.
"Tenemos que reconstruir dos materialmente y tenemos también que reconstruir esta nación, y eso demanda de un esfuerzo sostenido, participando todos, 68 y 17".
Hernández habló sobre un templete instalado en la nueva plancha del Zócalo, frente a Palacio Nacional, a donde la marcha que salió de la Plaza de las Tres Culturas llegó en una hora de caminata.
"La diferencia del 68 y hoy es que en 68 logramos un cierto nivel de organización, hoy el reto es caminar a esa organización de todos", agregó Hernández.
Sobre su primera demanda reiteró que el Gobierno mexicano cometió un crimen de Estado usando los recursos públicos a su alcance, por lo que lamentó que la matanza siga en la impunidad.
En la marcha, después del Comité 68 y los padres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos, marcharon estudiantes de la UNAM, la UAM, la UACM y de diversas escuela normales.
Según datos del Gobierno de la Ciudad de México la movilización congregó a 4 mil manifestantes, los cuales a las 19:26 horas comenzaron a dispersarse de la plaza.
Un grupo de anarquistas realizó pintas y tronó diversos cohetes, sin generar mayores disturbios.
Las consignas que se gritaron exigían justicia tanto por la matanza de Tlatelolco como por la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa.
Sobre el templete y a nombre de los padres de los normalistas de Ayotzinapa, Vidulfo Rosales reprochó la falta de justicia transicional en México, como ya ha ocurrido en otros países del continente.
Araceli Osorio, madre de Lesvy, pidió combatir todos los feminicidios, mientras que el rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, Alejandro Vera Jiménez, planteó que los alumnos no regresen a las aulas y convertir éstas en albergues.