Agencia Reforma
2017-06-25Ciudad de México— En Veracruz, las víctimas de homicidio doloso pasaron de 375 entre enero y mayo de 2016, a 748 en el mismo periodo de este año, lo que significó un aumento de 99 por ciento.
Esta ola de violencia es atribuida por las autoridades a la disputa de territorios por parte de organizaciones criminales.
En los últimos días, la entidad ha vivido jornadas sangrientas que incluyen desde la decapitación de al menos cinco personas, como ocurrió a finales de mayo, hasta la ejecución de altos mandos de la Policía Federal el sábado pasado.
De acuerdo con fuentes consultadas por Grupo Reforma, el grupo armado responsable del ataque a elementos de la PF en el restaurante La Bamba es el Cártel Jalisco Nueva Generación.
En los primeros cinco meses de 2017 se iniciaron 625 carpetas de investigación por homicidio doloso en la entidad y, en el mismo periodo del año pasado, la Fiscalía estatal abrió 323 indagatorias.
Según esas cifras, los asesinatos intencionales prácticamente se han duplicado durante la gestión del gobernador panista Miguel Ángel Yunes, quien, al asumir el cargo, el 1 de diciembre de 2016, afirmó que una de sus prioridades sería la seguridad.
Desde entonces, el Estado han realizado distintos operativos de seguridad, junto con fuerzas federales, y la violencia no ha disminuido.
Fin de semana mortal
Por lo menos 18 personas fueron asesinadas el sábado en la entidad, entre ellos un mando estatal de la Policía Federal y cuatro menores.
Camilo Castagné, coordinador estatal de la Policía Federal en la entidad fue ejecutado, junto con otros dos federales, en el restaurante La Bamba, en el Municipio de La Antigua, cerca de Cardel, sobre la carretera Xalapa-Veracruz.
El gobernador Miguel Ángel Yunes confirmó el hecho.
El ataque ocurre en un contexto de violencia por la difusión de imágenes y nombres de presuntos delincuentes en diferentes anuncios, en los que se ofrece una recompensa de un millón de pesos por su captura.
Además de los federales, otras 15 personas fueron ejecutadas en distintos hechos en la entidad.
Casi al mismo tiempo que fueron atacados los federales, una familia fue atacada a balazos en el Municipio de Coatzacoalcos, al sur del Estado.
Ahí, un comando asesinó a dos adultos y cuatro menores.
En Minatitlán, tres personas fueron ejecutadas, así como otro hombre en Pánuco, uno en Las Choapas, una persona en Cosoloacaque, uno más en Moloacán y dos mujeres en Orizaba, de acuerdo con reportes preliminares.
"Cometieron una barbaridad terrible; son actos cobardes llenos de vileza que nos dan una idea de lo que nos estamos enfrentando, no nos estamos enfrentando a seres humanos, nos estamos enfrentando a bestias, a cobardes, a viles, a personas que son capaces de asesinar a niños, de tener secuestrados a los veracruzanos", aseguró Yunes en un mensaje en redes sociales.
"No vamos a permitir que impongan su ley de la violencia en Veracruz, no vamos a permitir que la delincuencia organizada mande en Veracruz", sostuvo.
Designan fiscal en caso de menores
Yunes ofreció una recompensa de un millón de pesos a quienes entreguen información sobre los responsables del asesinato de cuatro niños en Coatzacoalcos y asignó de un fiscal especial para el caso.
En un video divulgado en su cuenta en Twitter, anunció su decisión tras recibir críticas en las redes sociales, ya que en un primer mensaje sólo ofreció recursos por información relacionada con los agresores de dos mandos y un agente de la Policía Federal (PF) en Cardel.