Antoio Baranda/
Agencia Reforma
Ciudad de México— Felipe Flores Velázquez, exjefe de la Policía de Iguala implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, fue detenido ayer por elementos de la Policía Federal (PF).
El hombre, de 58 años de edad, fue capturado en Iguala, Guerrero, después de visitar a su cónyuge en un domicilio particular.
Era buscado desde hace casi dos años mediante una orden de aprehensión girada por un juez de distrito en Tamaulipas, por los delitos de secuestro y delincuencia organizada.
En octubre del año pasado, la Procuraduría General de la República (PGR) ofreció una recompensa de 2.5 millones de pesos a quien diera datos veraces y útiles para localizar al exmando.
El comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales, explicó en conferencia de prensa que Flores Velázquez fue uno de los responsables de coordinar el operativo policial que derivó en la agresión a los estudiantes los días 26 y 26 de septiembre de 2014.
"Es señalado por acatar la instrucción, notoriamente ilegal, del exalcalde José Luis Abarca, consistente en perseguir y atacar a los normalistas que se trasladaban hacia la Plaza de las Tres Garantías ubicada en el Zócalo de dicha localidad, donde María de los Ángeles Pineda Villa, entonces presidenta del DIF municipal, rendía su segundo informe de labores", refirió.
El comisionado detalló que, según información de inteligencia, el mando presuntamente ordenó a policías municipales frenar a los estudiantes, lo que derivó en dos enfrentamientos que dejaron como saldo decesos, lesiones y la desaparición de los normalistas.
Reveló que en el operativo se detuvo a otras personas –cuyos datos no reveló– que fueron puestas a disposición de la PGR.
Flores Velázquez no iba armado al momento de la detención y que tampoco fue necesario que la PF efectuara disparos.
"(Se) desarrollaron por varios meses trabajos de investigación sustentados en el análisis de redes de vínculos y trabajo de gabinete, que permitieron ubicar el lugar en el que se encontraba este presunto responsable", señaló.
Ahora, Flores Velázquez, quien según declaraciones ministeriales servía al grupo criminal de Guerreros Unidos, es el detenido número 131 por el Caso Iguala.
"La indagatoria continúa, está abierta la carpeta de investigación. Si bien existen ya procesos penales por todos estos detenidos, también hay rutas y líneas de investigación que se están abordando", indicó Sales.
En el marco de la búsqueda de los estudiantes, contó, se han efectuado 8 mil 957 patrullajes, 698 operativos de búsqueda en puntos específicos de Guerrero, Morelos, Edomex y Puebla, 683 sobrevuelos y 94 operaciones aéreas con aviones no tripulados, entre otras acciones.
Autoridades han detenido a 131 personas. De ellas, 70 enfrentan un proceso penal y en su mayoría son policías y presuntos miembros del cártel que habría matado a los alumnos.