Excelsior
2016-08-30
Culiacán, Sinaloa— La principal línea que siguen las autoridades en el asesinato de Édgar Parra Zambada, sobrino de Ismael El Mayo Zambada, no está relacionada con el crimen organizado.
El secretario de Seguridad Pública y Tránsito de Culiacán, César Abelardo Rubio Olivas, informó que han recabado algunos datos que no tienen parentesco alguno con uno de los líderes del Cártel del Pacífico.
El pasado fin de semana fueron asesinadas siete personas en distintos puntos de Sinaloa.
Dijo que el ataque a Parra Zambada tampoco tiene relación con el secuestro de uno de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, en Puerto Vallarta Jalisco.
Al momento de reclamar el cuerpo, familiares de Édgar Parra Zambada dijeron a las autoridades que era comerciante de mariscos y la persona que lo acompañaba, y quien también murió en el ataque, tenía el oficio de albañil.
Los hechos
Ambos circulaban a bordo de un automóvil marca Acura, línea TC, color blanco, cuando fueron atacados a balazos con armas calibre .45 milímetros y fusiles AK-47 en la colonia Las Quintas.
Sin embargo, y como una medida de prevención, las autoridades de la entidad se encuentran analizando la posibilidad de regresar las Bases de Operaciones Mixtas Urbanas (BOMU), que son integradas por elementos de todas las corporaciones policiacas, incluidos el Ejército mexicano.
Hasta el momento se ha planteado la posibilidad de integrar las BOMU en Culiacán y Mazatlán, que es donde tienen repunte de homicidios dolosos, pero la decisión tendrá que ser avalada por el gabinete de Seguridad que preside el gobernador del estado, Mario López Valdez.