Arcelia Maya/
Agencia Reforma
Ciudad de México— La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) acordó sostener el paro indefinido de labores.
En la Asamblea Nacional Representativa celebrada la noche del miércoles, la dirigencia llamó a la unidad y la organización de todas las secciones sindicales.
Asimismo, diseñaron un plan de acción a corto mediano y largo plazos en el que contempla informar en todo el país sobre las respuestas del Gobierno Federal y los planes a seguir.
Hoy protestarán para recordar los hechos violentos de Nochixtlán y exigir castigo a los responsables.
Además, el lunes 22, día en que inicia el nuevo ciclo escolar, harán marchas estatales para exigir la reinstalación de la mesa de negociación con la Secretaría de Gobernación y la presentación de respuestas precisas.
El 23 de agosto continuarán con bloqueos en centros comerciales, garitas, puentes internacionales, carreteras y autopistas.
Mientras que el 26 de agosto la disidencia se sumará a la acción global por Ayotzinapa y hará protestas por la presentación con vida de los normalistas desaparecidos.
Para el día 25 se prevé realizar un foro legisladores.
Señalan a IP
La CNTE acusó que la decisión del Gobierno federal de emplazarlos para reiniciar clases el 22 de agosto tiene que ver con la presión que están ejerciendo grupos empresariales.
En su reunión del miércoles, la disidencia consideró que la invitación de Gobernación para que regresen a las aulas obedece a la incapacidad del Ejecutivo para resolver sus demandas.
“Obedece a una total cerrazón e incapacidad para dar respuesta precisas sobre los planteamientos generales que como Coordinadora hemos establecido en esta etapa de la lucha.
“Esta actitud irresponsable tiene que ver con la presión que los empresarios ejercen sobre ellos (el Gobierno federal) para poder hacer de las escuelas públicas y la educación uno más de sus negocios”, expuso en un documento.
En el escrito se agregó que las declaraciones oficiales sobre la posibilidad de usar la fuerza pública para contener las movilizaciones es el anuncio de una escalada de represión.
Las principales demandas de la CNTE, reiteró, son la abrogación de la reforma educativa, la aplicación de un proyecto alternativo de educación y resolver las consecuencias de la puesta en marcha de la reforma. A la asamblea magisterial asistieron 169 delegados de 24 representaciones sindicales de 22 estados de la República, informó la CNTE.