El Universal
2015-09-21
Tecámac– Magistrados federales otorgaron ocho amparos definitivos y provisionales a propietarios de circos en Guanajuato, Veracruz y Oaxaca para que pueden utilizar animales durante sus funciones, luego de que el 8 de julio entró en vigor una ley que prohíbe emplearlos en las carpas mexicanas.
Con la resolución, los dueños de esos circos reanudaron los espectáculos públicos en esos sitios desde hace unos días, informó Armando Cedeño Álvarez, presidente de la Unión Nacional de Empresarios y Artistas de Circo (UNEAC).
Seis de los amparos son definitivos, cuatro de ellos concedidos por magistrados en Guanajuato y dos en Veracruz, así como dos provisionales, uno en Veracruz y otro en Oaxaca.
Carlos Ernesto Farías Flores, titular del Juzgado Séptimo de Distrito Guanajuato, determinó otorgar la suspensión provisional al propietario de un circo para que reanude sus actividades con la utilización de especies en sus instalaciones.
"Puede continuar utilizando los animales... Única y exclusivamente en los espectáculos y funciones públicas que se desarrollen dentro de las instalaciones del "Circo Rolan" que afirma es de su propiedad", establece el dictamen del magistrado.
El 8 de julio pasado entró en vigor en el país una ley promovida por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el que se prohíbe el empleo de animales en circos nacionales.
Los legisladores de ese instituto político argumentaron supuesto maltrato de los dueños de las especies para que no se permitiera más el empleo de animales en espectáculos públicos.
Después de la prohibición los empresarios recurrieron a la justicia mexicana para evitar que la restricción afecte la actividad circense que tiene más de 200 años de tradición en México.
En total, presentaron 38 amparos ante la justicia federal en diferentes entidades de la República Mexicana donde funcionan las carpas.
Armando Cedeño, informó que las 16 peticiones de suspensión que presentaron en el Distrito Federal y Estado de México fueron rechazadas por los jueces federales, por lo que recurrirán al recurso de revisión para que les permitan emplear a las especies en sus espectáculos.
Desde que restringió el uso de animales los ingresos en los circos nacionales disminuyeron en más del 80%, lo que afectó a miles de familias que dependen de esa actividad.
No obstante que los precios para acudir a las carpas mexicanas se redujeron en más del 50% la gente dejó de acudir porque el atractivo principal para ellos son los animales.
Algunos de los domadores que se quedaron sin empleo en el país tuvieron que irse a trabajar a circos de Estados Unidos pero "vendiendo palomitas o otra actividad a la que hacían", dijo el presidente de la UNEAC.